La población griega respondió a la incertidumbre ante la posibilidad de impago de la deuda con una huelga general que ha provocado la cancelación de todos los vuelos comerciales en el país, además del cierre de escuelas y museos.
Los manifestantes continúan con paros laborales en una muestra de descontento con el último plan de austeridad de Atenas para evitar un default de la deuda griega.
Las autoridades griegas esperan que la huelga tenga impacto también en muchos servicios públicos, ámbito en el que se busca colocar a 30.000 funcionarios en paro técnico con un salario reducido del 40% de aquí a finales de año, antes de un probable despido. El gobierno planea reducir los 750.000 puestos públicos a 150.000 para 2015, según informa France Press.
Por lo pronto, Aegean Air dijo que todos los vuelos han sido cancelados después de que los controladores de tráfico aéreo anunciaran que se unirían al paro. Se han notado también las interrupciones en autobús, ferry y tren también, mientras las escuelas y muchas oficinas gubernamentales cerraron desde temprano.
Los manifestantes bloquearon la entrada a varios edificios del gobierno, incluyendo los Ministerios de economía y trabajo de Grecia.
Los manifestantes dijeron que no querían perder sus empleos o ver reducidos sus salarios como parte de la ampliación de las medidas de austeridad destinado a apaciguar a los acreedores internacionales de crédito y evitar una crisis económica aún mayor.
Miembros de la eurozona y el Fondo Monetario Internacional está tratando de decidir si se debe liberar la próxima entrega de los fondos. Antes de la próxima entrega de fondos a la comunidad internacional se están buscando señales de una reducción significativa por parte del gobierno griego.
Grecia anunció que se perderá los objetivos de reducción de la deuda en casi un 1%.