El tema de Irán se ha ubicado en los titulares en Israel desde que el pasado viernes 28 de octubre de 2011, Nahum Barnea, un destacado columnista del diario Yediot Aharonot, alertó de la presión en el seno del gobierno para lanzar un ataque.
Un sondeo publicado por el diario Haaretz indica que la opinión pública israelí está dividida sobre la conveniencia de un eventual ataque contra el programa nuclear de Irán.
Según el sondeo del rotativo un 41% de los israelíes está a favor de lanzar un ataque contra Irán, un 39% se opone y un 20% está indeciso.
Según el diario Haaretz, el primer minstro Benjamin Netanyahu y el ministro de Defensa, Ehud Barak, tratan de lograr en el seno del consejo de ministros una mayoría a favor de un bombardeo relámpago en Irán.
En la sesión inaugural de invierno del Parlamento, el primer ministro Benjamín Netanayhu consideró una amenaza directa para Israel que Teherán logre desarrollar una bomba atómica.
Según Netanyahu, “un Irán nuclear supone una gran amenaza para todo Medio Oriente y el mundo, y una amenaza directa para Israel. El concepto de seguridad no puede basarse sólo en la defensiva, debe incluir capacidad de ataque”, afirmó.
El jefe del Estado Mayor de Irán, el general Hassan Firouzabadi, advirtió a Israel y sus aliados que serán castigados si comenten el grave error de atacar a la República Islámica.