El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, dijo que la muerte de Osama Bin Laden es un momento decisivo en la lucha global contra el terrorismo.
También el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, felicitó al presidente Barack Obama y al pueblo de EE.UU., por el “importante golpe asestado contra la organización criminal que cometió el peor atentado terrorista en la historia de las Américas”.
Insulza señaló en un comunicado que "la violencia terrorista socava los valores y principios del sistema interamericano” y reiteró el perenne compromiso de la OEA de “continuar promoviendo y desarrollando la cooperación interamericana para prevenir, combatir y eliminar dicho flagelo”.
Entre tanto, en Afganistán, el presidente Hamid Karzai, aliviado por la certeza de que Osama bin Laden no se encontraba en ese país, hizo un llamamiento a los talibanes para que dejen lucha armada.
Pakistán despertó este lunes 2 de mayo de 2011 con la noticia de que el líder de al-Qaeda, Osama Bin Laden, fue abatido el domingo en un tiroteo con fuerzas estadounidenses en Abottabad, población al norte de Islamabad.
"La muerte de Osama Bin Laden ilustra la resolución de la comunidad internacional, incluyendo de Pakistán, de luchar y eliminar el terrorismo", dijo el gobierno de Islamabad.
El embajador de Pakistán en Estados Unidos anunció que las autoridades de su país harán una "investigación a fondo" sobre las fallas de los servicios de inteligencia en la búsqueda de Bin Laden.
Por su parte, el gobierno de la India declaró que la muerte de Bin Laden confirma que Pakistán es un "santuario" para los terroristas.
Rusia saludó este "éxito importante" de EE.UU. al igual que Turquía, un país laico de mayoría musulmana.
En sentido contrario, Irán consideró que la muerte de Bin Laden deja a "EE.UU. y a sus aliados sin excusas para mantener a sus fuerzas en Medio Oriente bajo pretexto de luchar contra el terrorismo".
Mientras que Arabia Saudita, país de nacimiento de Bin Laden y en el que su familia posee millonarios negocios en el sector de la construcción, declaró que su muerte es un paso importante en la lucha internacional contra el terrorismo.
En América Latina
El gobierno venezolano condenó las celebraciones de la muerte de Osama bin Laden, mientras otros gobiernos latinoamericanos felicitan a Washington por acabar con la vida del cerebro de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
El vicepresidente venezolano Elías Jaua dijo a la televisora estatal que "no deja de sorprender cómo se ha naturalizado el crimen y el asesinato, y cómo se celebra".
Al criticar a Estados Unidos, el vicepresidente dijo para "el imperio ya no hay otra salida, la salida política, la salida diplomática quedaron atrás. Aquí lo único que impera es el asesinato".
Brasil confía que la muerte de Bin Laden no lleve a al-Qaeda a cometer actos que "desencadenen más violencia". Brasil condena "todas las formas de terrorismo" y asegura que "en la medida en que Al Qaeda y Osaba bin Laden están detrás de estrategias políticas que privilegian las acciones terroristas", el gobierno brasileño "solamente puede solidarizarse con las víctimas y con quienes desean justicia".
Por su parte, Uruguay comunicó que el deceso de Osama bin Laden es "un golpe al terrorismo internacional", pero que "ninguna muerte puede ser celebrada".
México afirmó que la muerte del líder terrorista Osama Bin Laden es "un hecho de gran trascendencia en los esfuerzos para liberar al mundo del flagelo del terrorismo" que amenaza a la paz y la seguridad internacionales.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, felicitó a Obama y a las fuerzas de seguridad estadounidenses por la operación que terminó con la muerte del terrorista Osama Bin Laden.
La yihad continúa
"Osama pudo ser asesinado pero su mensaje de Yihad nunca morirá. Hermanos y hermanas, esperen y vean, su muerte será un bendición disfrazada", escribió una persona en un foro yihadista.
Muchos niegan que sea cierta la ejecución de Bin Laden, si bien aseguran que de serlo habrá represalias. "Oh Dios, por favor haz que estas noticias no sean verdad (...) Que Dios te maldiga, Obama," dijo un mensaje en un foro en lengua árabe. "Oh estadounidenses (...) aún es legal que nosotros cortemos sus cuellos", agregó según la agencia Reuters.
Por otra parte, la Autoridad Palestina asegura que "librarse de Bin Laden es bueno para la causa de la paz mundial, pero lo que importa es superar el discurso y los métodos violentos que fueron creados y fomentados por Bin Laden y otros en el mundo", señaló Ghassan Khatib.
Sin embargo, en la Franja de Gaza, Ismail Haniyeh, dirigente del grupo terrorista palestino HAMAS condenó la muerte de quien considera "un guerrero árabe sagrado”.
Mientras tanto, los Hermanos Musulmanes de Egipto enviaron un mensaje de alerta a las tropas estadounidenses al considerar que deberían ser retiradas de Afganistán e Irak, donde se libraron dos guerras lideradas por Washington.
En Europa
El presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, felicitó a Obama e hizo llegar las noticias de “satisfacción compartida con el pueblo americano por el resultado de la operación antiterrorista que ha conducido a la muerte de Osama Bin Laden”.
Por su parte, el primer ministro de Inglaterra, David Cameron, apuntó la muerte de Osama bin Laden es un "gran paso adelante" en la lucha contra el terrorismo, pero advirtió de la importancia de mantener la "vigilancia" ante el riesgo de represalias.
En la misma línea, el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, consideró la muerte de Osama bin Laden una "derrota histórica de la plaga del terrorismo", pero señaló que no supone el fin de al-Qaeda y que el combate contra esta organización "debe continuar sin descanso". "El combate contra la peor de las cobardías, atacar a inocentes, ciertamente no ha terminado".
Italia, que convocará en Roma la Comisión de Análisis Estratégico Antiterrorista (CASA), expresó su "satisfacción" por la "eliminación" del terrorista más buscado del mundo.
Alemania, que frustró un ataque terrorista hace dos días, celebró el operativo y asegura que "el hecho que este terrorista hay pagado sus crímenes sangrientos es una buena noticia para todas las personas de paz y libertad del mundo", señaló el ministro del Exterior, Guido Westerwelle.