Estados Unidos reabrió su embajada en Pakistán, pero los consulados en dos ciudades están aún cerrados al público, un día después que fuerzas estadounidenses mataran a Osama bin Laden en la ciudad de Abbottabad, en el norte del país.
La embajada estadounidense en Islamabad estaba abierta al público al igual que el consulado en la ciudad de Karachi.
Los consulados en Peshawar y Lahore continuaban cerrados al público hasta nuevo aviso, pero ofrecen servicios de emergencia a ciudadanos estadounidenses.
El Departamento de Estado norteamericano advirtió a los estadounidenses que viven en el exterior que extremen la vigilancia ante temores de posibles ataques en represalia por la ejecución de Osama bin Laden.
Las instalaciones del gobierno estadounidense en todo el mundo han elevado el estado de alerta y pueden cerrar temporalmente o suspender sus servicios al público para evaluar las necesidades de seguridad.
Pakistán no participó
Las fuerzas de seguridad pakistaníes fueron excluidas de la operación estadounidense para matar a Osama bin Laden, explicó el president eAsif Ali Zardari.
La relación entre Pakistán y Bin Laden se ha visto cuestionada al comprobar que Pakistán posee una base militar en la misma ciudad en la que fue hallado el terrorista.
"No estaba en un lugar donde habríamos anticipado que estaría, pero ahora ha desaparecido", escribió Zardari en una columna de opinión publicada en el Washington Post.
"Aunque los hechos del domingo no fueron una operación conjunta, una década de cooperación y sociedad entre Estados Unidos y Pakistán condujeron a la eliminación de Osama bin Laden como una amenaza continua para el mundo civilizado", agregó.
Los congresistas afirmaron que revisarán los miles de millones de dólares en ayuda que Washington envía a Pakistán.
"Nuestro Gobierno están con problemas fiscales. Hacer contribuciones a un país que no va a ayudar completamente es un problema para muchos", dijo la presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, Dianne Feinstein.
La Casa Blanca reconoció que había buenas razones para que los congresistas estadounidenses, que ya dudaban de la cooperación de Pakistán contra al-Qaeda, exijan saber si Bin Laden se había estado "ocultando a plena vista" y que planteen preguntas sobre la ayuda estadounidense a Islamabad.