El primer ministro británico, David Cameron, afirmó que Gran Bretaña debe revertir lo que definió como el colapso moral, a lo que atribuyó los mortales disturbios de la semana pasada.
Cameron dijo, este lunes 15 de diciembre de 2011, que su gobierno de coalición establecerá nuevas políticas para hacer frente al problema.
El gobernante afirmó que “una de las principales lecciones de estos disturbios es que tenemos que hablar honestamente sobre la conducta y después actuar, porque la mala conducta ha llegado literalmente a la vuelta de la esquina, y no podemos ocultarnos la verdad por más tiempo".
El primer ministro británico dijo que la situación generada "deber ser un llamado de atención para nuestro país. Los problemas sociales que han estado gestándose por décadas han explotado en nuestra cara”.
Los recientes disturbios causaron cinco muertos y miles fueron arrestados y enfrentan acusaciones criminales.
La violencia siguió a un fatal tiroteo de un hombre en Tottenham, un barrio pobre de Londres y se extendió a otras ciudades de Gran Bretaña. También ha generado dudas sobre la seguridad, cuando Londres se prepara para ser sede de los Juegos Olímpicos 2012.