Las fuerzas estadounidenses se están preparando para evacuar a cientos de empleados que trabajan para Lockheed Martin Corp y Sallyport Global desde una base militar iraquí donde trabajan como contratistas, dijeron el viernes tres fuentes militares iraquíes.
Casi 400 contratistas de las dos firmas se están preparando para abandonar la base militar de Balad, que alberga a las fuerzas estadounidenses a unos 80 km (50 millas) al norte de Bagdad, por "amenazas potenciales de seguridad", dijeron, sin decir cuáles podrían ser esas amenazas.
El ejército estadounidense negó cualquier evacuación planificada de la extensa base de Balad, que la semana pasada fue golpeada por tres proyectiles de mortero. Nadie ha reivindicado la responsabilidad del ataque.
"No hay planes en este momento para evacuar a ningún personal de Balad (...) Si aumentan las amenazas para nuestra gente, la Fuerza Aérea de EE. UU. implementará las medidas necesarias para brindar las protecciones necesarias", dijo el coronel de la Fuerza Aérea Kevin Walker en un comunicado. declaración.
Una portavoz de Lockheed en el Medio Oriente dijo: "No estamos evacuando a los empleados de Lockheed Martin en este momento de la Base Aérea de Balad". Ella no dijo si se estaba preparando otra evacuación.
Un oficial militar con conocimiento de las operaciones diarias de la base dijo anteriormente que el ejército de Estados Unidos había informado a los oficiales iraquíes que comenzarían a evacuar a la mitad de los 800 empleados que trabajan para ambas compañías en Balad.
El funcionario dijo que la evacuación demoraría unos 10 días.
Otras dos fuentes militares dijeron que la evacuación se llevaría a cabo en dos etapas y se llevaría a cabo en un avión militar.
"Los estadounidenses nos informaron que solo mantendrán al personal limitado y necesario que trabajará estrechamente en el mantenimiento de los aviones de guerra F-16 iraquíes". Lockheed Martin comenzó a entregar los primeros F-16 a Irak en 2014.
Las fuentes dijeron que la evacuación podría comenzar en cualquier momento.
Crisis regional
Otras dos bases iraquíes que albergan a las fuerzas estadounidenses han sido alcanzadas por cohetes la semana pasada en ataques no reclamados. El miércoles, un ataque con cohetes golpeó cerca de un sitio utilizado por la empresa energética estadounidense Exxon Mobil cerca de la ciudad sureña de Basora.
Los funcionarios locales culparon a las milicias chiítas respaldadas por Irán por el incidente de Basora. Irán no ha comentado sobre los incidentes de Irak, pero ha rechazado enérgicamente las acusaciones de Washington de que estuvo detrás de varios ataques contra petroleros en el Golfo en las últimas semanas.
El aumento de la violencia se produce en medio de la creciente tensión regional entre los Estados Unidos e Irán.
Washington ha aumentado las presiones sobre Teherán desde el año pasado y varios incidentes violentos en el Golfo han sido atribuidos a la creciente tensión.
El presidente Donald Trump dijo el viernes que había cancelado una huelga de Estados Unidos contra Irán en el último minuto.
En Irak, Irán respalda a varias milicias chiítas musulmanas que tienen posiciones cercanas a las instalaciones militares de los Estados Unidos.
Esas milicias no han comentado públicamente los recientes incidentes.
El grupo militante sunita Estado Islámico también está tratando de reaparecer en Irak y, en su mayoría, ha utilizado tácticas de insurgencia para golpear y correr contra las fuerzas iraquíes en los últimos meses.
