En Chile, la desaprobación a la presidenta Michelle Bachelet alcanzó en agosto su máximo nivel impulsada en parte por una investigación que involucra a su hijo y a su nuera.
Un sondeo de la consultora GfK Adimark, este miércoles, señala que la desaprobación de la líder chilena aumentó a 72% y su popularidad alcanzó un 24%, dos puntos porcentuales menos que en julio.
Ambas cifras son las más bajas de su actual gestión y de su anterior mandato entre 2006 y 2010.
El porcentaje de desaprobación es el peor para cualquier presidente desde 2006 cuando Adimark comenzó a realizar la encuesta.
El lento crecimiento de la economía chilena complica reformas claves iniciadas por Bachelet y la reputación de la mandataria se ha visto ensombrecida por acusaciones de que su hijo Sebastián Dávalos, usó sus conexiones políticas para que su esposa recibiera un préstamo de $10 millones de dólares que usó para comprar terrenos que luego vendió en $15 millones de dólares.
La gobernante izquierdista que lideró Chile de 2006 a 2010, inició su segundo mandato en marzo de 2014.