El propietario del crucero italiano Costa Condordia, que el viernes 13 de enero de 2012 encalló y terminó parcialmente hundido, provocando la muerte de seis personas, dijo que el capitán del buque cometió “errores de juicio” al tomar decisiones.
La compañía Costa Crociere informó que las decisiones adoptadas por el capitán durante la situación de emergencia, no fueron tomadas de acuerdo con los procedimientos de la compañía, que según informaron, cumplen con los estándares internacionales.
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Sin embargo, la compañía no especifica cuales fueron las decisiones equivocadas adoptadas por el capitán Francesco Schettino.
El capitán permanece detenido, acusado de homicidio, por supuestamente navegar fuera de curso y abandonar el barco mientras los pasajeros trataban desesperadamente de ponerse a salvo.
El barco que llevaba más de 4.000 personas a bordo, encalló y quedó semihundido en las últimas horas del viernes 13 de enero de 2012 frente a las costas de la isla de Giglio, ubicada frente a la costa norte de Italia. Los sobrevivientes describiendo escenas caóticas y aterrorizadoras durante todo el incidente.
Algunos de los sobrevivientes dijeron que no había ninguna organización, mientras otros optaron por saltar a las heladas aguas del mar Mediterráneo.
La cuenta de víctimas fatales se elevó cinco personas después de que los rescatistas encontraran a dos ancianos atrapados en una cabina en el buque sumergido, y por lo menos 15 aún permanecían desaparecidas este domingo.
Cuando el barco golpeó las rocas, las autoridades informaron que los pasajeros fueron instruidos para colocarse los chalecos y subirse a los botes salvavidas, pero quienes estaban a bordo dijeron que el barco se inclinó tan rápido que muchos botes no pudieron ser desprendidos para rescatar a los pasajeros.
El crucero Costa Concordia tiene 290 metros de largo,13 cubiertas, 13 barras de bares, cinco restaurantes, cuatro piscinas y 500 camarotes.