Una delegación de ocho legisladores visitarán la próxima semana dos centros de detención de inmigrantes en Texas para ser testigos de las condiciones en las que viven mujeres y niños detenidos a la espera de una cita con un juez.
El representante de Illinois, Luis Gutiérrez se tomará la tarea de entrevistar a los “refugiados” en su propio idioma para inspirar confianza y demostrarles que su presencia es con el fin de ayudarlos y no se trata solo de una visita social.
Los legisladores visitarán los centros para inspeccionar en carne propia las situaciones precarias en las que se encuentran los “refugiados”, entre ellos familias enteras que han sido privadas de necesidades básicas como agua y comida, debido a la sobrepoblación en estos centros de detención.
Organizaciones pro-derechos humanos levantan la mano y se hacen presentes para proveer ayuda y darles un mejor estilo de vida a los “refugiados” mientras estos esperan ser procesados.
Pese a las medidas tomadas por el Departamento de Seguridad Nacional, siguen saliendo a la luz anomalías del trato de las familias confinadas.
Se espera que con la visita del sumo pontífice el próximo septiembre a Estados Unidos, la iniciativa humanitaria de los ocho políticos sirva para que se implementen medidas alternativas más humanitarias a mujeres y niños detenidos.
