Bolivia amaneció el miércoles con una nueva presidenta, después que apoyada en la sucesión constitucional, la senadora de la oposición Jeanine Áñez asumió el cargo en una sesión que no contó con la participación de diputados y senadores del oficialista Movimimiento Al Socialismo.
Áñez se proclamó presidenta luego de dos intentos fallidos por falta de quorum. Su proclamación llega en medio de lo que fue visto como un vacío de poder tras la renuncia de Evo Morales días atrás.
Con la Biblia en la mano y rodeada de los legisladores de la oposición, Áñez se dirigió a los bolivianos desde el Palacio de Gobierno y se comprometió a buscar la pacificación del país a través de la convocatoria a nuevas elecciones.
"El boliviano merece vivir en libertad, merece vivir en democracia y nunca más se les robe el voto, esta Biblia, nuestra fuerza y Dios", dijo.
A Morales también se dirigió en su cuenta de Twitter.
"Señor expresidente Morales: una reelección no es un derecho humano".
En una respuesta inmediata, el expresidente de Bolivia, Evo Morales, -que llegó el martes a México tras el asilo político otorgado por el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador-, aseguró que se consumó el golpe más "artero y nefasto de la historia".
Morales catalogó a la legisladora Áñez como una "senadora de la derecha golpista".
El miércoles, la presienta encargada se encontró con el Alto mando Policial de Bolivia, a quien agradeció su gestión y expresó su apoyo.
El presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, pidió a la población levantar los bloqueos que mantuvieron en vilo al país por 21 días con movilizaciones ciudadanas contundentes.
"Hemos logrado reencontrarnos entre los cruceños y poder llevar este mensaje de libertad, que esta no era la Cuba de los hermanos Castro ni es la Venezuela de Maduro, esta es la Bolivia de los bolivianos", expresó.
A su vez celebró el ascenso de Áñez.
A Morales también se dirigió Camacho en su cuenta de Twitter.
"Señor expresidente Morales: una reelección no es un derecho humano", enfatizó.
El candidato presidencial y expresidente de Bolivia, Carlos Mesa, también apoyó y felicitó a Áñez.
Sin embargo, continúan fortaleciendo en cifras los grupos que rechazan la renuncia de Morales, según constató la Voz de América. Algunos piden el retorno de Morales y aseguran que no hubo fraude, pese a los resultados de la auditoría de la OEA, que determinó que sí hubo irregularidades y recomendó nuevas elecciones.
Vecinos de El Alto, en La Paz, y las federaciones de cocaleros del trópico de Cochabamba, anunciaron movilizaciones para exigir el retorno de Morales al país.
La población aún mantiene las vigilias en algunos puntos de las ciudades, mientras se espera el retorno a la normalidad en los próximos días.
Por su parte, Rafael Quispe, diputado por Unidad Demócrata, le dijo a VOA Noticias que se debe reconocer a la presidenta y dijo que en Bolivia hubo fraude y que Evo Morales "no conoce la norma, no conoce la ley".