Bolivia, la nación andina en medio de una severa crisis y vacío institucional, podría presentarse próximamente al mundo con rostro de mujer.
Se trata de Jeanine Añez, la vicepresidenta del Senado que pidió el lunes a las fuerzas del orden que actúen para frenar el caos en las calles por las protestas y el enfrentamiento entre simpatizantes y opositores del expresidente Evo Morales.
También se encargó el lunes de convocar a una sesión de la Asamblea Legislativa boliviana para el martes, que abordará si acepta o no de manera formal la renuncia de Morales y a partir de ahí comenzar a decidir un liderazgo interino con miras a unos nuevos comicios.
¿Quién es Jeanine Añez?
Añez nació en la ciudad de Trinidad, departamento oriental de Beni. Esta abogada tiene 52 años de edad y ganó el escaño en la constituyente de 2006 a 2008, cuando Bolivia dio curso a su nueva Constitución.
En su perfil de Twitter, la senadora Añez se autodenomina “demócrata, autonomista, madre, y defensora de la libertad y la democracia”.
En el año 2010 Añez fue nombrada senadora por el partido Plan Progreso en la coalición Bolivia-Convergencia Nacional, sin embargo actualmente está en el Senado por la Unidad Demócrata.
De la crítica a la conciliación
Aunque la abogada Añez ha sido una fuerte crítica del gobierno de Morales y el Movimiento al Socialismo (MAS), este lunes ante los brotes de violencia en el país por la renuncia de Morales y otros funcionarios de altos rangos, se ofreció a abrir camino a la paz.
Visiblemente emocionada, la mujer dijo ante los medios que su objetivo es “dar una certidumbre al país”.
“Es urgente que le demos una certidumbre a la gente. Por lo tanto, si hay un acompañamiento de las organizaciones civiles, yo voy a asumir (la dirección del país)”, indicó, e inmediatamente precisó que si la voluntad popular se decidiera por otro representante “también lo voy a aceptar”.
Las críticas de Añez a Morales fueron incluso hasta cargarle a éste la responsabilidad por actos "vandálicos y vejatorios", incluso contra mujeres.
“Cobardes!!! Agrediendo mujeres!!! Delincuentes!!! Es tu culpa Evo Morales!!!”, escribió Añez el lunes.
El pasado 8 de noviembre, cuando Morales declaró ante la prensa que no renunciaría y clamó por el apoyo de sus partidarios, Añez ripostó: “¿Qué clase de mandatario es éste? Ordenando más confrontación entre bolivianos porque no lo dejan prorrogarse en el poder”.
Añez necesita la aprobación del MAS
El Movimiento Al Socialismo (MAS) controla la Asamblea Legislativa Plurinacional desde 2010. Tiene dos tercios de los votos tanto en la Cámara de Diputados como la Cámara de Senadores. Esto equivale a 25 de los 36 miembros de la Cámara del Senado, y 88 de los 130 integrantes de la Cámara de Diputados.
Ante lo que los asambleístas han llamado un “vacío de poder" que buscan llenar para que el país recobre la normalidad, se necesita que la mayoría de los diputados del MAS acudan a la convocatoria.
El artículo 169 de la Constitución en Bolivia indica que cuando hay ausencia del presidente y su segundo al mando, las funciones serán asumidas por el titular del Senado, a falta de este, el máximo representante de la Cámara de Diputados que debe convocar elecciones en un plazo de 90 días.
La jefatura de Estado recaería en Añez, segunda vicepresidenta del Senado, debido a que todos sus superiores en esa escala de poder renunciaron con la huida de Morales.