Decenas de reclusos del cárcel El Dorado, en Ciudad Bolívar, iniciaron una huelga de hambre en rechazo a la violencia carcelaria y en apoyo a los presos de Rodeo I y Rodeo II, donde un grupo de reos armados impiden desde hace cinco días el ingreso de militares al penal.
Según el Coordinador de la Comisión de Derechos Humanos de la delegación de abogados de Caroní, Luis Manuel Guevara, los reclusos demandan que cese el derramamiento de sangre en las cárceles, y hasta ahora son 82 los que se han sumado a la huelga de hambre.
Mientras tanto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al gobierno de Venezuela garantías para la protección de los familiares de los reclusos que aún permanecen en las cercanías de las cárceles Rodeo I y II, tras una operación militar durante la que 2.500 reos fueron trasladados a otras penitenciarías.
El viernes pasado, unos 5.000 miembros de la Guardia Nacional Bolivariana emprendieron una operación para desarmar a los reclusos de la prisión El Rodeo I y su vecina Rodeo II, y como consecuencia de la cual dos militares y un preso murieron y 22 soldados resultaron heridos.
Las fuerzas militares utilizaron gases lacrimógenos también para dispersar a los familiares de los presos que se hallaban en las inmediaciones de las dos cárceles.
La operación se llevó a cabo luego de revueltas carcelarias en las que murieron 22 personas y 14 resultaran heridas en El Rodeo I, como consecuencia de choques entre bandas que se disputaban el control del penal.
Los militares requisaron en la cárcel El Rodeo I un arsenal de armas, municiones y gran cantidad de drogas, en tanto que en Rodeo II un grupo de presos armados mantiene como rehenes a otros reclusos e impiden el ingreso de las fuerzas de seguridad.
