La Unión Europea y Ucrania iniciaron este martes conversaciones de membresía, un proceso que podría llevar años y que Rusia históricamente ha tratado de impedir.
Las conversaciones se producen una década después de que las tropas rusas se apoderaran de la península de Crimea para impedir que Ucrania estableciera relaciones con Occidente.
Las negociaciones de adhesión comenzaron durante una conferencia intergubernamental celebrada en Luxemburgo. Olga Stefanishyna, viceprimera ministra para la integración europea y euroatlántica, encabeza la delegación de Ucrania.
"Hoy marca el comienzo de un nuevo capítulo en la relación entre Ucrania y la Unión Europea", dijo el primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal, al inicio de las conversaciones.
En una publicación en el sitio de redes sociales X después de que la UE aceptara entablar conversaciones, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy aseveró: “Generaciones de nuestro pueblo están haciendo realidad su sueño europeo. Ucrania está regresando a Europa”.
Está previsto que Moldavia inicie las conversaciones sobre su membresía en la UE más tarde el martes.
Un país candidato debe alinear sus leyes y estándares con la política de la UE en temas que incluyen el movimiento de mercancías, las preocupaciones ambientales y la seguridad.
Los 27 países miembros deben aceptar una incorporación de la UE. Hungría ha sido históricamente un obstáculo para el apoyo de la UE y la OTAN a Ucrania.
“Aún estamos en el comienzo del proceso de selección. Es muy difícil decir en qué etapa se encuentra Ucrania. Por lo que veo aquí, mientras hablamos, están muy lejos de cumplir los criterios de adhesión”, dijo el ministro húngaro de Asuntos Europeos, Janos Boka.
Si se le concediera el estatus de miembro, Ucrania superaría a Francia en territorio y se convertiría en el miembro más grande del bloque. Su estatus como principal productor de cereales también afectaría la política agrícola de la UE.
Las conversaciones, si bien constituyen un hito, podrían tardar años en finalizar. Es poco probable que las negociaciones formales comiencen hasta dentro de unos meses.
Turquía ha estado en conversaciones de adhesión durante casi dos décadas sin llegar a un resultado. Otros países que esperan son Albania, Bosnia y Herzegovina, Georgia, Montenegro, Macedonia del Norte y Serbia.
Ucrania busca ser miembro para 2030, pero primero debe completar docenas de reformas institucionales y legales.
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