Unicef define el trabajo infantil como cualquier trabajo que supere una cantidad mínima de horas, dependiendo de la edad del niño o niña y de la naturaleza del trabajo.
Se calcula que en todo el mundo hay 158 millones de niños y niñas de entre 5 y 14 años que trabajan, lo que equivale a 1 de cada 6 niños y niñas. Además, millones de ellos lo hacen en condiciones de peligro.
Esas cifras son todavía más alarmantes en África subsahariana, donde aproximadamente 1 de cada 3 niños y niñas trabajan, lo que representa 69 millones de menores de edad.
En Asia meridional hay otros 44 millones niños y niñas que trabajan, según el informe anual de Unicef Estado Mundial de la Infancia.
“El trabajo suele interferir con la educación de los niños y niñas. Velar por que todos los niños y niñas vayan a la escuela y reciban una educación de calidad son las claves para prevenir el trabajo infantil”, proclama Unicef.