El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ordenó una revisión de todas las regulaciones gubernamentales sobre la actividad empresarial, para asegurar la protección a ciudadano común estadounidense, sin sofocar el crecimiento económico.
En un artículo de opinión, en el diario The Wall Street Journal, el presidente Obama dijo que las leyes que regulan actividades como el trabajo infantil y la contaminación ambiental crearon el “equilibrio adecuado” entre la libertad de comercio y la protección pública a sus amenazas de salud y seguridad.
No obstante, el mandatario señaló que algunas veces “esas regulaciones se han desequilibrado, colocando cargas poco razonables en las empresas que”, según dijo, “han tenido un efecto desalentador en el crecimiento y los empleos”.