Las autoridades de Joplin, Missouri, en el centro de Estados Unidos, elevaron a 138 el número de muertes causadas por el tornado que azotó la ciudad, el pasado domingo 21 de mayo de 2011.
El número de víctimas fatales aumentó después que cuatro personas que habían sido hospitalizadas fallecieron, indicaron los funcionarios.
Más de 500 personas han muerto este año a causa de tornados, la mayor cifra de fatalidades desde 1950.
El tornado que arrasó Joplin, con vientos de hasta 300 kilómetros por hora, destruyó casas y edificios, aplastó vehículos y arrancó árboles de raíz.
El Servicio Meteorológico de Estados Unidos dice que fue el tornado más mortífero del país desde 1947. A su regreso de su viaje a Europa, a fines de mayo de 2011, el presidente Barack Obama visitó la zona afectada.
En la presente semana otras cuatro personas murieron cuando un tornado afectó la ciudad de Springfield en el nororiental estado de Massachusetts, una zona donde este tipo de tormentas ocurre muy raramente.
