“No tengo ninguna duda de que Joplin será reconstruida” dijo el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en su primera visita a la población arrasada por un tornado en el estado de Missouri.
El mandatario viajó a la ciudad del centro-oeste de Estados Unidos apenas regresó de su gira europea para ofrecer directamente a las víctimas de la tragedia y los familiares de los fallecidos un mensaje de consuelo y aliento.
El devastador tornado con vientos de 300 kilómetros por hora, el más fuerte en las escalas de medición, que afectó la ciudad de 50 mil habitantes el domingo 21 de mayo por la noche, dejó 142 personas muertas, muchas de las cuales aún no han podido ser identificadas, y al menos 40 desaparecidos.
La devastación coloca al tornado como el más mortal en los últimos sesenta años.
Muchos residentes treparon por sobre los escombros y se abrieron camino separando muebles destruidos para llegar hasta el mandatario y estrechar su mano, después de que Obama hablara en una ceremonia religiosa en recuerdo por las víctimas.
El presidente Obama fue recibido con una ovación y hasta con gritos de afecto por parte de la audiencia, a lo que el mandatario respondió afectuosamente también diciendo: “Los quiero mucho Joplin, los quiero mucho”.
Obama dijo a la audiencia que una vez que la consternación tras el tornado desaparezca, posiblemente los residentes de Joplin podrían llegar a sentirse abandonados.
Sin embargo, aseguró que eso no ocurrirá. “Como presidente puedo prometerles que todo el país estará con ustedes, acompañándolos en cada paso del camino de la reconstrucción”.
El mandatario afirmó que “no nos vamos a ir a ninguna parte. Probablemente las cámaras de televisión y los fotógrafos se vayan. Posiblemente el centro de atención cambie. Pero nosotros seguiremos con ustedes paso a paso, hasta que Joplin sea restaurada y la comunidad recupere su tirmo. No nos vamos a ir a ninguna parte” insistió el presidente Obama.
La emotividad de las palabras llevó a que todo el coro ubicado detrás del presidente durante la ceremonia se pusiera de pie para aplaudirlo.
También el mandatario reflexionó sobre aquellos que perdieron la vida tratando de salvar a otro y urgió a los sobrevivientes a vivir con el mismo sentido de compasión por el prójimo.
El presidente Obama también transmitió la preocupación que mostraron por la situación en Joplin los líderes mundiales con los que se reunió durante su viaje de seis días por Europa y transmitió a los residentes las condolencias que recibió.
