Partidarios del presidente de Siria, Bashar al-Assad, arrojaron tomates al embajador de Estados Unidos en Damasco, Robert Ford, y trataron de atacar la oficina a la que el diplomático llegaba para reunirse con el opositor sirio Hassan Abdul-Azim.
Según informó el propio dirigente opositor del partido Socialista Árabe para la Unión Democrática, unos cien manifestantes pro Assad se encontraban frente a sus oficinas esperando la llegada del embajador estadounidense en Damasco y actuaron en forma violenta cuando el diplomático arribó para la reunión.
La policía llegó una hora más tarde, cuando apenas una decena de manifestantes permanecían frente a las oficinas del político opositor sirio.
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, condenó la agresión contra el embajador Robert Ford, calificando el incidente como "totalmente injustificado". Clinton exigió que las autoridades sirias cumplan con sus obligaciones internacionales para proteger a todos los diplomáticos extranjeros.
Resolución contra Siria
Mientras tanto, el Consejo de Seguridad de Naciones Uniones está considerando una resolución de compromiso con Siria que evite sanciones inmediatas, pero que condene la escalada de violencia y los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y soldados disidentes.
Los 15 miembros del Consejo se reunieron para discutir el proyecto de resolución de la crisis siria elaborado por las potencias europeas y Rusia.
Francia, Gran Bretaña, Alemania y Portugal propusieron una nueva resolución en la que amenazan con sanciones inmediatas contra Assad si no pone fin a su ofensiva mortal contra protestas de la oposición.
Rusia se opone a cualquier indicio de sanciones, al igual que India, Brasil y algunos otros miembros no permanentes del Consejo, que también están en contra de la imposición de medidas punitivas en Damasco.
Los diplomáticos esperan votar el nuevo proyecto a finales de la semana.
