La destrucción de un campamento y la captura de dos narcoterroristas sospechosos de pertenecer a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue el resultado de dos enfrentamientos registrados entre unidades del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) de Panamá, con irregulares colombianos.
Los enfrentamientos se registraron cerca al Río Tuira de la comunidad selvática de Madugandí, en la provincia de Darién, colindante con Colombia, en un campamento que había sido descubierto previamente en la zona fronteriza.
Las fuerzas de seguridad de Panamá siguen buscando a otros sospechosos que habrían conseguido escapar hacia la frontera con Colombia, en lo que es el segundo incidente de enfrentamiento entre unidades del Senafront de Panamá y la guerrilla colombiana de las FARC en un día.
Tras conocer la noticia, el ministro de Seguridad, José Raúl Mulino, viajó a la provincia, donde señaló que espera que se hagan las investigaciones respecto a los dos colombianos capturados.
Por su parte, Frank Ábrego, director del Senafront, dijo que el campamento tenía una capacidad para unas 60 personas, había alimentos secos y otros enseres, que según él, demuestran que el lugar ha sido utilizado por estos irregulares.
