El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, convocó este viernes a los poderes públicos para zanjar diferencias en torno a fallos mediante los cuales el Tribunal Supremo de Justicia asumió las competencias del Parlamento, de mayoría opositora, y retiró la inmunidad a los diputados.
"Asumo, a través del diálogo y la Constitución, la tarea de resolver hoy mismo (este viernes) el 'impasse' que ha surgido entre el Ministerio Público y el Tribunal Supremo de Justicia”, dijo Maduro.
“Convoco al Consejo de Seguridad de la Nación para este viernes mismo para deliberar y sacar una resolución", dijo Maduro, luego de que la fiscal general Luisa Ortega declaró que se había producido una "ruptura del orden constitucional".
Maduro, quien habló desde Caracas, calificó como 'injerencia' las acciones que ha llevado a cabo la Organización de Estados Americanos (OEA) para ayudar a solucionar la crisis institucional en ese país.
El presidente de Venezuela se ha enfrentado a una serie de críticas de la comunidad internacional. Algunos países, como Colombia y Chile han llamado a consultas a sus embajadores en Venezuela.
Seis países suramericanos (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, y Uruguay), pertenecientes a Unasur, pidieron este viernes al gobierno venezolano respete el "Estado de Derecho, los derechos humanos, así como a las instituciones democráticas".
Además deploraron el quebrantamiento institucional con la decisión del Tribunal Supremo de Venezuela de "limitar las facultades de la Asamblea Nacional" (el Legislativo) de ese país.
Durante su intervención, Maduro negó que haya una ruptura del orden constitucional y aseguró que hay plena vigencia de la Constitución, luego de que el máximo tribunal asumiera las funciones del Parlamento y retirara la inmunidad a los diputados.
"En Venezuela hay plena vigencia de la Constitución, de los derechos civiles y políticos, de los derechos humanos y del poder popular", dijo Maduro en un acto con sus seguidores.