El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) alertó de una “escalada alarmante” de la lucha entre las tribus progubernamentales y los rebeldes Shiite en el norte de Yemen.
Andrej Mahecic, portavoz de ACNUR afirmó que han registrado al menos una veintena de personas asesinadas en la región en los últimos 10 días.
La agencia asegura que se trata de uno de los peores ataques violentos en la frontera entre Yemen y Arabia Saudita desde que los rebeldes Houthi y las fuerzas del gobierno firmaran el alto el fuego en febrero de 2010.
La oleada de violencia ha alcanzado también al sur de Yemen, donde las autoridades enfrentan dos batallas contra el bloque separatista y la insurgencia de al-Qaeda en la península arábiga.
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“La inestabilidad y la lenta implementación del acuerdo de paz está prolongando el desplazamiento en Yemen, donde más de 300.000 personas están todavía desplazadas y necesitan ayuda”, denuncia ACNUR en un comunicado de prensa.
Alrededor de 20.000 yemeníes se encuentran internamente desplazados y denuncian la inseguridad y el miedo a las represalias ante las nuevas luchas que están impidiendo su retorno.
Yemen también acoge a 170.000 refugiados, la mayoría procedentes de Somalia y otras regiones del norte de África.
Alerta en EE.UU.
Estas declaraciones aparecen tras el anuncio del máximo oficial militar de Estados Unidos, Mike Mullen, quien afirmó que la rama de al-Qaeda en la península arábiga supone una seria amenaza para Estados Unidos, ya que se ha vuelto más peligrosa en los últimos dos años.