La ex secretaria de Estado de Estados Unidos, Condoleezza Rice, pasó a ser en 2008 la funcionaria estadounidense de mayor rango que visitaba Libia en más de 50 años.
En agosto de 2011, tres años después, los combatientes rebeldes libios que tomaron por asalto el complejo del ex líder libio, Moammar GadhafiBab y descubrieron un extraño vínculo entre Gadhafi y Rice.
Entre los tesoros encontrados en el complejo de Gadhafi, había objetos extremadamente lujosos, como un sofá de oro engalanado con una sirena en el respaldo para su hija, y otros menos exquisitos, pero igualmente excéntricos. Entre todo lo que fue encontrado, no sin sorpresa fue hallado un álbum de fotos que tenía Gadhafi repleto de imágenes, precisamente, de Condoleezza Rice.
Refiriéndose a ella como su “querida mujer africana negra”, Gadhafi había confesado públicamente en una entrevista a la cadena de televisión Al-Jazeera en 2007 que la admiraba.
"La admiro y estoy muy orgulloso de la forma en la que se reclina y da órdenes a los líderes árabes... Leezza, Leezza, Leezza. La amo mucho", dijo entonces.
Previo a la visita, Gadhafi expresó a través de sus asesores que pretendía recibir a la ex secretaria de Estado en su tienda.
Sin embargo, tal como Rice dice en su libro que saldrá en poco a la venta, No Higher Honor ("No hay honor más alto"), declinó la invitación y el encuentro formal se produjo en la residencial oficial.
Pero Gadhafi mantuvo sus actitudes excentricas, al punto que rompió su ayuno de Ramadán y, según recuerda el Huffington Post, procuró obsequiar a su invitada con costosos regalos.
La asistencia de Rice a la residencia de Bab al-Aziziya se produjo además, según recuerda la ex secretaria de Estado, solamente después de asegurar que los familiares de las víctimas del Vuelo 103 de Pan Am, que había sido derribado por agentes libios sobre la ciudad escocesa de Lockerbie, en 1988, fueron compensadas.
Además, la visita fue acordada años después de que Libia renunciara al terrorismo y dijera en 2003 que abandonaba sus gestiones para desarrollar armas de destrucción masiva.
Pero las imágenes del álbum que fue encontrado durante el asalto rebelde, generaron una reacción de poco placer por parte de la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, quien en la oportunidad dijo: "creo que no necesito verlas para definir como estrambótico y repulsivo el comportamiento de Gadhafi".