“Brasil ha vuelto”, dijo Luiz Inácio Lula da Silva, su presidente, durante la mayor parte del último año, al presentar a su país como un líder del Sur Global.
Y en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Lula se encontró este miércoles con el presidente Joe Biden para reafirmar su posición.
“Una nueva era para la relación entre Estados Unidos y Brasil, entre socios iguales, una relación soberana, pero de interés común que beneficia a los trabajadores de su país y de mi país."
Hablando de clima y trabajo, los dos países anunciaron una cooperación bilateral para promover los derechos de los trabajadores y detener la explotación laboral. Y con el objetivo de incorporar más socios globales.
Joe Biden dijo: "La gente de la clase trabajadora tiene la oportunidad de ascender y a los ricos todavía les va bien siempre que paguen sus impuestos, en cualquier caso".
Entre tanto, en el pleno de la Asamblea General, este miércoles se pronunciaron algunos presidentes latinoamericanos como Guillermo Lasso, de Ecuador, quien subrayó el papel de su país en la lucha para tutelar el medioambiente y enfrentar el flujo migratorio, en particular desde Venezuela.
“Queremos darles un mejor futuro, garantizando todos sus derechos. [...] Sin embargo, la política de puertas abiertas requiere el valioso apoyo de la comunidad internacional. Nuestra acción ha sido coherente, solidaria, y de ella humildemente esperamos reciprocidad”.
Al cerrar la primera parte de la jornada, la presidenta hondureña Xiomara Castro pidió cooperación multinacional para activar el crecimiento económico, en particular mirando a la situación que está viviendo Haití.
“No debemos olvidar nuestros hermanos y hermanas de Haití. La crisis humanitaria de una nación oprimida y revolucionaria merece todo nuestro apoyo y nuestra solidaridad“.
Sobre Haití, el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, llegó a pedir una intervención internacional en la isla.
"El Consejo de Seguridad necesita autorizar urgentemente la misión de seguridad respaldada por la ONU. Un esfuerzo para detener el flujo ilícito de armas y un llamado a la creación de una fuerza multinacional para ayudar a la Policía Nacional de Haití”.