Le gustaba el teatro. Un hobby que practicaba mientras asistía a clases en la Universidad Jagellónica de Cracovia hasta que los nazis la cerraron durante la ocupación de Polonia.
En 1939 se acabó el teatro, las clases y la diversión. A los 19 años Karol Józef Wojtyla trabajó en una cantera, y en la fábrica química Solvay, para ganarse la vida y evitar ser deportado a Alemania.
Al contrario que la mayoría de las personas, la oración se tornó clandestina cuando sintió la vocación, en 1942, cuando se alistó al seminario clandestino de Cracovia, dirigido por el Arzobispo de Cracovia, Cardenal Adam Stefan Sapieha.
De Roma al mundo
Todos los caminos llevan a Roma, adonde llegaría en 1948, pero el camino que a Juan Pablo II le interesaba entonces era el que siguió San Juan de la Cruz, sobre quien realizó su tesis doctoral (Doctrina de fide apud Sanctum Ioannem a Cruce).
Pero no sería hasta el 16 de octubre de 1978 que Karol Wojtyla dejaría de ser Karol Wojtyla. Entonces, los cardenales reunidos en Cónclave decidieron nombrarle Papa bajo el nombre de Juan Pablo II.
A los 58 años Karol Wojtyla se convirtió en Juan Pablo II, el Papa número 263 en la línea sucesoria del Apóstol Pedro. Su pontificado ha sido uno de los más largos de la historia de la Iglesia y ha durado casi 27 años.
“Juan Pablo II ejerció su ministerio petrino con incansable espíritu misionero, dedicando todas sus energías, movido por la "sollicitudo omnium Ecclesiarum" y por la caridad abierta a toda la humanidad. Realizó 104 viajes apostólicos fuera de Italia, y 146 por el interior de este país. Además, como Obispo de Roma, visitó 317 de las 333 parroquias romanas”, explica la Santa Sede.
El peregrino de Dios
El camino de Juan Pablo II le condujo a reunirse con los peregrinos del mundo. Más de 17.600.000 peregrinos participaron en las 1166 Audiencias Generales que celebraba los miércoles.
Todo ello sin contar las audiencias especiales y las ceremonias religiosas, en especial la del Gran Jubileo del año 2000, con más de 8 millones de peregrinos.
Durante sus 38 visitas oficiales y las 738 audiencias o encuentros con jefes de Estado y 246 audiencias y encuentros con Primeros Ministros tuvo la oportunidad de llevar su mensaje de paz y unidad a las numerosas personalidades con las que se entrevistó.
¿Funcionó? Esperanza y recuerdo movilizaron entonces a millones de jóvenes de todo el mundo en las Jornadas Mundiales de la Juventud que inició en 1985.
Él mismo celebró 147 ceremonias de beatificación ‒en las que proclamó 1338 beatos‒ y 51 canonizaciones, con un total de 482 santos para mostrar ejemplos de santidad contemporánea.
Pero una personalidad tan destacada también despertó recelos. El 6 de noviembre de 1979 un joven Italiano trató de acuchillarle, si bien fue detenido antes de que lo intentara.
El 13 de mayo de 1981, la situación se repite. Alí Agca, miembro de un grupo extremista, le disparó en el vientre y en la mano al iniciar una audiencia en la Plaza San Pedro. Años después el Papa Juan Pablo II le visitó en la cárcel para concederle su perdón.
Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005, a las 21.37, mientras concluía el sábado. El 28 de abril, Benedicto XVI dispensó del tiempo de cinco años de espera tras la muerte para iniciar la causa de beatificación y canonización de Juan Pablo II.