Lograr que más de mil barcos transporten desde los puertos ucranianos del Mar Negro cerca de 33 millones de toneladas de productos agrícolas es una de las metas de Estados Unidos durante su presidencia del Consejo de Seguridad este mes. El Secretario de Estado intervino en el primer debate de alto nivel.
“Rusia rompió ese acuerdo. El resultado ha sido el aumento de los precios en países de todo el mundo, una disminución en el acceso a estos productos alimenticios, particularmente para los países en desarrollo. Y como hemos visto, las acciones de Rusia desde entonces, no solo al romper el acuerdo, sino al apuntar intencionalmente a los silos de alimentos en Ucrania, están literalmente destruyendo los alimentos”, enfatizó Antony Blinken, Secretario de Estado.
El gran reto será lograr un acuerdo con Rusia en la mesa del Consejo de Seguridad.
“No es su tarea imponer la posición de sí mismo o de sus aliados al resto de los miembros. Tal vez esté bastante bien en el orden internacional basado en reglas, pero no está bien dadas las tradiciones y las prácticas que tenemos en el Consejo, y estamos protegiendo esta práctica. Pero no se deje engañar, Rusia no está bloqueando la discusión de los asuntos ucranianos”, dijo Dmitry Polyanskiy, Vice embajador de Rusia ante la ONU.
La embajadora Thomas-Greenfield no escatimará esfuerzos para proteger los derechos humanos en las zonas de conflicto.
“Tendremos una reunión el 24 de agosto para discutir la protección de los civiles en Ucrania, incluidos los niños. Y no dudaremos en convocar reuniones adicionales sobre la guerra de agresión de Rusia y otros temas de interés para la paz y la seguridad internacionales”, comentó Linda Thomas-Greenfield, Embajadora de Estados Unidos ante la ONU.
Según Blinken, los alimentos se están usando como arma y cerca de 260 millones de personas padecen de inseguridad alimentaria en el mundo a consecuencia de los conflictos armados.