El gobernador del estado de Colorado, Bill Ritter, aprobó el uso de un programa federal que identifica a los inmigrantes indocumentados mediante el uso de huellas dactilares de quienes han estado en la cárcel.
La decisión provocó una airada reacción de varios grupos pro inmigrantes y abogados que alegan que la aplicación del nuevo programa provocará deportaciones injustas y persecución por estereotipos raciales.
Ritter, quien deja la gobernación el 11 de enero de 2011, anunció por correo electrónico su decisión de aceptar el programa Comunidades Seguras, aunque con algunas modificaciones después de meses de deliberaciones.
Entre las modificaciones con las que Colorado participará están reportes trimestrales y estadísticas, a fin de que el estado pueda evaluar cómo funciona.
El programa administrado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) usa las huellas digitales existentes en los registros del FBI y del Departamento de Seguridad Nacional, una capacidad que muchas jurisdicciones locales no tienen de inmediato.
El programa ya se usa en 891 jurisdicciones de 35 estados, y el ICE ha dicho que espera tenerlo en todas las cárceles para el 2013.