A pesar de que entró en vigencia el toque de queda en Egipto, decenas de miles de manifestantes anti gubernamentales aún permanecen en la plaza (Tahrir) Liberación, este viernes 4 de febrero, exigiendo la renuncia inmediata del presidente Hosni Mubarak.
Imágenes de televisión muestran a manifestantes gritando consignas y ondeando la bandera roja, blanca y negra de Egipto. Otros han erigido grandes carteles mostrando lo que parece ser una efigie del presidente Mubarak.
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Los manifestantes llaman este viernes “el día de la partida de Mubarak”. Esta semana, el mandatario egipcio aseguró que culminará su mandato.
Amr Moussa, jefe de la Liga Árabe, se sumó a las manifestaciones. Moussa es un veterano político egipcio que se ha desempeñado como canciller de su país. La radio Europa 1 de Francia dijo que él estaría pensando postularse a la presidencia pero que cree que Mubarak finalizará su período.
Miles de manifestantes antigubernamentales también se dieron cita en Alejandría, donde se lleva a cabo una concentración pacífica. Miles de personas también participan en manifestaciones contra Mubarak en Suez y otras ciudades.
Dos días de enfrentamientos
Tras dos días de violentos enfrentamientos entre los manifestantes que piden la salida del poder del presidente de Egipto, Hosni Mubarak, y los partidarios del gobierno, la oposición parece determinada a persistir y este viernes 4 de febrero de 2011 realiza la más grande de todas las movilizaciones.
Miles de manifestantes anti gubernamentales desbordan la plaza Tahrir (Liberación), en El Cairo, en una gigantesca protesta en lo que han dado en llamar “el día de la partida” del presidente Hosni Mubarak.
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Un pequeño grupo de seguidores del mandatario egipcio se reunió también en El Cairo, pero las fuerzas de seguridad les impidieron ingresar a la plaza Tahrir. Los partidarios de Mubarak llamaron a su manifestación "día de la lealtad".
Miles de manifestantes también realizan una protesta pacífica en Alejandría. Informes de prensa indican que miles más asisten a demostraciones contra el gobierno en Suez, Ismailía y otras ciudades.
La repuesta de la oposición a la violencia desatada en los últimos dos días por los partidarios del gobierno y que ha dejado al menos ocho muertos y 900 detenidos, ha sido una convocatoria aún mayor.
Multitudes de egipcios desfilan frente a los soldados que realizan chequeos de seguridad y cacheos, a lo largo de la ruta hacia la plaza Tahrir, el foco de más de una semana de masivas manifestaciones que piden la inmediata renuncia de Mubarak.
El ministro de Defensa egipcio, Hussein Tantawi, fue visto visitando la Plaza, este viernes por primera vez desde que comenzaron las protestas. Informes desde el lugar describen la atmósfera en la Plaza como calma, pero tensa.
Transición
Mientras tanto, los líderes de la oposición insisten en que éste es el día de la partida de Mubarak y han redoblado sus esfuerzos de convocatoria, cuando también crece la presión internacional y los contactos para facilitar la salida del poder del mandatario.
Incluso en una entrevista exclusiva concedida el jueves 3 de febrero a la periodista Christiane Amanpour de la cadena estadounidense ABC News, y que será emitida este viernes, Mubarak dijo que le gustaría dejar la presidencia ahora, pero teme que Egipto se hunda en más caos si lo hace.
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En un discurso televisado a la nación, esta semana, el presidente Mubarak, que gobierno Egipto desde hace 30 años, prometió terminar su período, pero indicó que no buscará la reelección.
Autoridades estadounidenses dijeron, el jueves, que Washington ha comenzado a conversar con autoridades egipcias sobre una propuesta para que Mubarak renuncie inmediatamente, y entregue el poder a un gobierno transicional encabezado por el vicepresidente Omar Suleiman, con el apoyo de los militares egipcios.
Autoridades estadounidenses dijeron, el jueves, que Washington ha comenzado a conversar con autoridades egipcias sobre una propuesta para que Mubarak renuncie inmediatamente, y entregue el poder a un gobierno transicional encabezado por el vicepresidente Omar Suleiman, con el apoyo de los militares egipcios.
El presidente Barack Obama se refirió a la situación en Egipto durante el Desayuno Nacional de Oración en la Casa Blanca diciendo que "estamos conscientes de la violencia que estamos viendo ahora en el Medio Oriente y oramos por que la violencia en Egipto termine, y que los derechos y aspiraciones del pueblo egipcio se hagan realidad y que un día mejor amanezca sobre Egipto y en todo el mundo”.
En la tarde de este viernes 4 de febrero de 2011, tras su reunión con el primer ministro de Canadá, SStephen Harper, el presidente Obama responderá preguntas de la prensa respecto a Egipto.