Las principales naciones industrializadas prometieron apoyo económico y político para cinco países del norte de África y del Medio Oriente que están en transición hacia la democracia después de revueltas contra sus líderes autoritarios.
Los ministros de Relaciones Exteriores del Grupo de los 8 (G-8), se reunieron en Nueva York, al margen de la Asamblea General de las Naciones Unidas. En la reunión también participaron los cancilleres de varios países de la región.
El canciller francés, Alain Juppe, quien habló en nombre del grupo, dijo que fueron prometidos $80.000 millones de dólares para ayudar a Túnez, Egipto, Marruecos, Jordania y Libia durante los próximos dos años.
El ministro francés agregó que habrá programas para ayudar a entrenar a jueces y periodistas, programas para ayudar con las elecciones y para alentar el diálogo que ya comenzó con la sociedad civil. Los programas económicos se centrarán en expandir el comercio y las inversiones.
Los ministros árabes participantes en la reunión están de acuerdo en que sus países enfrentan grandes desafíos, incluyendo proveer buenos trabajos a sus millones de jóvenes ciudadanos.