Hay “casi un consenso” para participar de la Cumbre de las Américas, dijo el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en referencia a la asistencia de los presidentes de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA).
Sin embargo, el mandatario aclaró que el encuentro de líderes de este año en Cartagena de Indias, Colombia, debería ser el último sin la participación de Cuba.
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Los comentarios de Chávez revelaron también falta de sintonía con las declaraciones del presidente de Bolivia, Evo Morales que puso en duda su participación, e incluso las del canciller boliviano, David Choquehuanca que dijo que los países del ALBA aún no habían discutido el tema.
Incluso el presidente de Ecuador, Rafael Correa, quien originalmente propuso un boicot a la Cumbre de las Américas en Colombia, sigue sin definir su participación.
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Chávez dijo que discutió el tema con sus colegas del ALBA y con las presidentas de Brasil, Dilma Rousseff y de Argentina, Cristina Fernández.
Morales sin confirmar
Aunque durante su visita a Colombia, la semana pasada, Evo Morales le había anunciado al presidente Juan Manuel Santos que asistiría a la Cumbre de las Américas, ahora el ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, David Chiquehuanca, dice que la asistencia del mandatario no ha sido confirmada.
El canciller boliviano dijo en Brasilia, la capital de Brasil, que la asistencia de Morales al encuentro continental depende de la decisión final de la Alianza Bolivariana de las Américas (ALBA).
Morales, sin embargo, se reunió con el presidente Santos la semana pasada y aceptó clausurar una Cumbre Social que se realizará a la par de la Cumbre de las Américas. Ante esto, el canciller Choquehuanca aclaró que el presidente boliviano puede estar en la cumbre social sin que eso signifique que esté participando en la Cumbre de las Américas.
Mientras tanto, los países del ALBA mantienen un proceso de “consultas” sobre su asistencia al encuentro continental en Cartagena, debido a que ellos insisten en que Cuba debería ser invitada, aspecto que Estados Unidos no comparte pues considera que la isla no cumple con los "requisitos democráticos" para participar.