El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo el martes que los tanques M1 Abrams prometidos por el Pentágono llegarán pronto a Ucrania, y que los esfuerzos para entrenar a pilotos ucranianos en aviones F16 se están ampliando para incluir entrenamiento con base en Estados Unidos.
Hablando al comienzo de una reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania liderado por Estados Unidos en Alemania, Austin instó a los aliados a proporcionar a Ucrania los sistemas de defensa aérea que necesita mientras Rusia apunta a sitios de infraestructura como puertos e instalaciones de granos.
Austin dijo que los ataques rusos más allá del campo de batalla “han infligido un sufrimiento humano incalculable” y amenazan la seguridad alimentaria mundial.
El grupo de contacto, que incluye a unas 50 naciones, debía centrarse el martes no sólo en las necesidades a corto plazo del ejército ucraniano, sino también en ayudar a Ucrania a “construir una fuerza de combate creíble y capaz para el largo plazo”, dijo Austin.
El jefe del Pentágono también acogió con agrado la participación del nuevo ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, quien reemplazó a Oleksii Reznikov a principios de este mes.
"Nos mantendremos unidos, nos mantendremos resueltos, nos mantendremos firmes en nuestra determinación de defender a Ucrania y defender un mundo donde la agresión no compensa", dijo Austin.
Funcionarios ucranianos dijeron el martes que los ataques aéreos rusos alcanzaron la ciudad de Lviv, en el oeste de Ucrania, y mataron a una persona.
El alcalde de Lviv, Andriy Sadovyi, dijo en Telegram que el ataque afectó a tres almacenes, que almacenaban ventanas, productos químicos domésticos y ayuda humanitaria.
La coordinadora humanitaria de la ONU para Ucrania, Denise Brown, condenó el ataque ruso y dijo que uno de los almacenes pertenecía a Caritas, la principal organización caritativa del Vaticano.
"La vital instalación humanitaria, que contenía aproximadamente 300 toneladas de suministros de socorro, fue quemada hasta los cimientos", dijo Brown en un comunicado. "Los ataques que afectan a los activos humanitarios se han intensificado a lo largo del año y, en última instancia, afectan a quienes sufren las terribles consecuencias de la guerra".
Lviv, ubicada cerca de la frontera de Ucrania con Polonia, es un centro clave para la ayuda occidental que ingresa a Ucrania y ha sido objetivo de ataques rusos anteriores.
El ejército de Ucrania dijo que las defensas aéreas destruyeron 27 de los 30 drones que Rusia utilizó en sus ataques, y que las interceptaciones se produjeron en el sur, el centro y el oeste de Ucrania.
El ejército también dijo que derribó un dron de reconocimiento ruso en la parte oriental del país.
[Parte de la información para este informe provino de la Agence France-Presse y Reuters]
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