El gobierno del presidente Donald Trump está listo para abrir cortes en carpas instaladas en la frontera para atender casos de solicitantes de asilo obligados a aguardar su proceso en México, y las audiencias se realizarán por completo a través de videoconferencias.
El tribunal tiene programado comenzar operaciones el lunes en Laredo, Texas. Y se prevé que se instale otra corte en Brownsville, en el Valle del Río Grande, el corredor con mayor número de cruces fronterizos ilegales.
El gobierno lanzó su política de que los solicitantes de asilo esperen en México en enero pasado en la ciudad de San Diego, y posteriormente la expandió a El Paso, Texas, pero las audiencias en esos lugares se realizan dentro de grandes edificios con tribunales convencionales, y por lo general el juez aparece en persona.
Dicha política, criticada por obligar a las familias a esperar en las peligrosas ciudades fronterizas de México, se ha convertido en parte fundamental de la respuesta de Estados Unidos al enorme incremento de familias que solicitan asilo, especialmente provenientes de Centroamérica.
México permitió la rápida expansión de la medida a través de un pacto firmado el 7 de junio que evitó, al menos de manera temporal, la amenaza de aranceles por parte de Trump.
El secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, y el vicepresidente estadounidense Mike Pence acordaron el martes expandir la política “en la medida de lo posible”, de acuerdo a un resumen del encuentro difundido por la Casa Blanca.
Alrededor de 40.000 solicitantes de asilo que no son mexicanos se han visto obligados a esperar en territorio mexicano a que sus casos avancen a través de las rebasadas cortes migratorias de Estados Unidos, según cifras del gobierno mexicano. El número incrementó después del acuerdo firmado en junio entre Estados Unidos y México, y el programa se expandió a Laredo y Brownsville.
La corte de Laredo manejará hasta 300 casos al día, señaló Alberto Flores, director de puerto de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, durante un recorrido el martes con la prensa, mismo que fue transmitido en vivo por la reportera de la televisora KGNS-TV, Brenda Camacho.
Se les ha pedido a los solicitantes de asilo que se reporten a Nuevo Laredo, en el lado mexicano de la frontera, hasta con cuatro horas de antelación a su cita, señaló Flores durante el recorrido de prensa por las instalaciones de 2.787 metros cuadrados (30.000 pies cuadrados).