La Casa Blanca informó que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pronunciará un discurso este lunes 28 de marzo de 2011, para explicar la situación actual en Libia y la política de Estados Unidos ante el conflicto.
El discurso del mandatario se realizará a las 19.30 hora del este de Estados Unidos, (23.30 GMT) en la Universidad Nacional de Defensa, en Washington, la capital del país, donde se espera se refiera también a la transferencia del liderazgo de las operaciones a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Mientras tanto, los líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), continuaban las medidas diplomáticas y militares para tomar control y comando de la misión internacional de parte de Estados Unidos.
Defensas aéreas destruidas
Durante su mensaje tradicional del fin de semana, el presidente Barack Obama defendió su decisión de que las fuerzas armadas de Estados Unidos tomen parte en las acciones militares contra Moammar Gadhafi en Libia y dijo que la operación “está teniendo éxito” y que se ha alcanzado logros importantes.
“Las defensas aéreas de Gadhafi han sido destruidas, sus tropas ya no ganan terreno en el país, y en lugares como Bengasi, las han repelido”, dijo el presidente en su discurso semanal de los sábados después que su decisión fue duramente criticada por algunos legisladores.
Obama señaló no tener la menor duda de que “debido a que actuamos rápidamente, se ha evitado una catástrofe humanitaria y salvamos la vida de innumerables civiles: hombres, mujeres y niños inocentes”.
También señaló no creer que Estados Unidos deba ni pueda intervenir cada vez que hay una crisis en algún lugar del mundo, “pero creo firmemente que cuando se trata de forma brutal a personas inocentes, cuando alguien como Gadhafi amenaza con una carnicería que podría desestabilizar a toda una región, entonces es de interés nacional actuar”, dijo.
En su discurso, enfocado exclusivamente en Libia, Obama destacó que como había prometido desde un comienzo, la función de Estados Unidos “ha sido limitada” y que la responsabilidad de operaciones se está transfiriendo de Estados Unidos “a nuestros aliados y socios de la OTAN”.
Indicó además que es así como debe trabajar la comunidad internacional, “que más países, no sólo Estados Unidos asuman la responsabilidad y el costo de velar por la paz y la seguridad”.
El presidente mencionó que se ha escuchado las voces de los libios expresando gratitud por la misión, y también afirmó que los estadounidenses deben sentirse orgullos de las vidas que han salvador en Libia.
Obama reiteró que el mensaje de Washington respecto al conflicto es claro y fime. “Los ataques de Gadhafi contra los civiles deben parar. Sus tropas deben retirarse. Se debe permitir que la ayuda humanitaria llegue a los necesitados. Se debe hacer que los responsables por la violencia rindan cuentas por sus actos”, precisó.
Apoyo de McCain
La administración Obama defendió su decisión de intervenir militarmente en Libia, a pesar de admitir que ningún interés vital de Estados Unidos está en juego en ese país.
El domingo, un día antes de que el presidente Barack Obama hable a la nación sobre los esfuerzos en Libia, el secretario de Defensa, Robert Gates, explicó que las operaciones “no era un interés nacional vital de Estados Unidos”, explicó el secretario de Defensa.
Sin embargo aclaró que “había un interés: el involucramiento de los árabes, el involucramiento de los europeos, la situación humanitaria general era lo que estaba en juego. Ha habido revoluciones al este y al oeste de Libia, en Egipto y en Túnez. Entonces había un potencial para que un hecho desestabilizador tuviera lugar en Libia que pusiera en riesgo, potencialmente, las revoluciones en Túnez y Egipto. Y esa fue otra consideración”.
Así como Gates, la secretaria de Estado Hillary Clinton, también habló en el programa “This Week” de la televisora estadounidense ABC, donde destacó lo que podría haber pasado sin una intervención en Libia.
“Imagínese si estuviéramos sentados aquí y Bengsi hubiera sido tomada, una ciudad de 700.000 habitantes y decenas de miles de personas hubieran sido asesinadas, cientos de miles de hubieran huido sin rumbo fijo o hubieran abrumado a Egipto, que tiene su propia difícil transición. Si estuviéramos sentados aquí pasivamente, la pregunta hubiera sido ¿Por qué EE.UU. no hizo nada?”.
El establecimiento de una zona de exclusión de vuelos sobre Libia tiene el respaldo del principal republicano en la Comisión de Servicios Armados del Senado, John McCain, de Arizona, quien dijo que “podríamos objetar la definición de intereses vitales. Dijimos después de Srebrenica, nunca más. Después de Ruanda, nunca más. Y después del Holocausto, nunca más”.
Por eso, ante “el hecho de que las fuerzas de Gadhafi estaban en las afueras de Bengasi y él dijera que iría casa por casa y mataría y asesinaría a la gente” no dejaba opciones. “Gracias a Dios, a último momento con la zona de exclusión de vuelos, impedimos que eso sucediera”, dijo McCain.
Algunos legisladores estadounidenses criticaron al presidente Obama por el uso de la fuerza en el exterior sin el consentimiento del Congreso. Pero el senador McCain había exhortado al gobierno de Obama a que actuara semanas antes de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas autorizara la intervención en Libia para impedir el asesinato de oponentes al gobierno.