Los republicanos dieron este sábado un holgado triunfo a Newt Gingrich en las elecciones primarias de Carolina del Sur, consideradas cruciales en la carrera que libran los cuatro aspirantes a la nominación presidencial por ese partido de cara los comicios de noviembre próximo.
El gobernador de Massachusetts Mitt Romney fue relegado a un segundo lejano lugar por un margen de más de 10 puntos porcentuales, según cifras preliminares ofrecidas cuando ya habían sido escrutados más del 70 por ciento de los centros de votación.
De acuerdo con los cómputos, Gingrich ganó con el 41 por ciento de los votos frente a 27 por ciento de Romney. Los otros dos contendientes, el ex senador por Pennsylvania Rick Santorum y el congresista por Texas Ron Paul habrían quedado en tercer y cuatro lugar, con 18 y 13 por ciento, respectivamente.
La victoria del ex presidente de la Cámara de Representantes sobre Romney le da un nuevo giro a la campaña republicana en busca del candidato que la disputará este año la Casa Blanca al demócrata Barack Obama.
A pesar de haberse impuesto en las primarias de Nueva Hampshire, Romney tuvo que batallar cuesta arriba en los últimos días frente a ataques relacionados con su gran fortuna personal, estimada en $270 millones de dólares, y su reconocimiento de que paga menos impuestos que el común de los estadounidenses.
Por su parte, Gingrich fue recuperando terreno favorable en los sondeos tras su desempeño en dos debates de los que se considera que salió bien librado, y luego del favor que parece haberle hecho la retirada de campaña y el apoyo que le dio el jueves 19 de enero a su candidatura el gobernador de Texas, Rick Perry.
Muchos no consideran sorprendente que el ex gobernador de un estado tan liberal como Massachusetts no haya podido imponerse en las primarias de otro como Carolina del Sur, donde los conservadores evangélicos constituyen alrededor del 60 por ciento del voto republicano.
A pesar de que hasta ahora Romney mantuvo ventaja, con una campaña más sólida en cuanto a organización y fondos disponibles, un nuevo sondeo difundido por American Research Group justamente antes de que se desarrollan las primarias, mostraba a Gingrich con un margen a su favor de 40-26 por ciento en las intenciones de voto.
Hace dos semanas, funcionarios de la campaña de Romney le anticipaban dos triunfos consecutivos, uno este sábado y otro el próximo 31 de enero en las primarias de Florida, lo que hubiera dado casi ya por seguro su nominación presidencial por los republicanos.
Sin embargo, desde horas antes de dar inicio la votación en Carolina del Sur, la propia campaña del ex gobernador restó fuerzas a sus expectativas de triunfo, en tanto que el bando de Gingrich auguró sin vacilación su segura victoria.
Esta es la tercera votación que se lleva a cabo después del caucus en Iowa y las primarias de Nueva Hampshire.
Desde 1980, ningún republicano fue nominado para la presidencia sin haber ganado en Carolina del Sur.