El presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, admitió que cualquier aumento en el tope de la deuda de EE.UU. implicará necesariamente que se adopten compromisos políticos.
En una rueda de prensa en el Capitolio, el republicano Boehner predijo que los republicanos terminarán aprobando algún tipo de acuerdo para evitar que el país se declare en mora.
También emplazó al presidente Barack Obama a mostrar liderazgo, y apuntó que “no es suficiente con desear o esperar una solución”.
En portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, reconoció que no ha habido progresos respecto a lograr un acuerdo para rebajar los gastos y a la vez evitar que el país se declare incapaz de hacer frente a los pagos de su deuda.
Sin embargo, Carney afirmó que la Casa Blanca “está absolutamente segura” de que el Congreso hará algo por elevar el límite de endeudamiento de la nación, que ya alcanzó el pasado 16 de mayo el tope de $14,3 billones de dólares.
A menos de dos semanas de que se venza el plazo el próximo 2 de agosto para elevar el techo de la deuda, las dos cámaras del Congreso demandan una de otra la promulgación de leyes o se exigen entre sí propuestas difíciles de aceptar para una mayoría de los legisladores.
En la cámara baja, controlada por los republicanos, Boehner, urgió al Senado a pasar un proyecto de legislación conocido como “Reducción, Límite y Balance” ya aprobado por sus correligionarios esta semana y que vincula el aumento del tope de la deuda a la adopción de las prioridades fiscales establecidas por ese partido.
El proyecto reduciría drásticamente el gesto federal y requeriría un mandato constitucional para balancear todos los años el presupuesto del gobierno, a la par que preservaría las actuales tasas tributarias y también las exenciones fiscales en vigor.
Pero el líder de la mayoría demócrata la cámara alta, Harry Reid, declaró que el plan de los republicanos “no tiene ni una oportunidad entre un millón de ser aprobado en el Senado”.
En su lugar, Reid urgió a los congresistas a forjar un acuerdo bipartidista para la reducción del déficit, algo que hasta ahora no han logrado ninguno de los dos partidos.
“Los demócratas han mostrado su voluntad de trabajar con los republicanos en cualquier plan serio y razonable que evite que el país se declare en mora de sus obligaciones, y le permita reducir el déficit de una manera balanceda, ahora son ellos los que deben demostrar que son serios”, dijo Reid.