Bajo juramento, Donald Trump testificó en el juicio civil que se lleva en su contra en Nueva York, que amenaza con disminuir su imperio inmobiliario. Fue un interrogatorio tenso y con evasivas por parte del expresidente, lo que no aceptó el juez y le pidió responder las preguntas en lugar de pronunciar un discurso. Fue el escenario que había anticipado la fiscal general.
“Trump ha tergiversado e inflado repetida y consistentemente el valor de sus activos. Y antes de que suba al estrado, estoy segura de que se involucrará en insultos, burlas y hostigamiento racial y llamará a esto una caza de brujas. Pero al final del día lo único que importa son los hechos y los números. Y los números, amigos míos, no mienten”, comentó Leticia James, Fiscal General del Estado de Nueva York.
Una gran parte de las preguntas se centraron en el valor y tamaño de su propiedad en Mar-at-Lago y otros de sus activos. Las prácticas contables de Trump, sus hijos y su organización ya fueron dictaminadas como fraudulentas por el juez. Lo que está por decidir ahora es si Trump debe restituir 250 millones de dólares, como cita la demanda. Los fiscales argumentan que esos métodos le permitieron exagerar su riqueza en 2 mil millones de dólares. Trump ha negado haber actuado mal, se ha quejado de interferencia electoral y ha apelado la primera decisión del juez.
“Y así, mientras Israel está siendo atacado, mientras Ucrania está siendo atacada, mientras la inflación está devorando vivo a nuestro país, yo estoy aquí y todo esto son oponentes políticos y ataques de la administración Biden. Sus cifras en las encuestas son terribles”, dijo Donald Trump.
Trump, quien ya acumula 15 mil dólares en multas por quebrantar la orden del juez de guardar silencio, se selló los labios en un gesto de silencio durante uno de los recesos en el tribunal.
El juicio civil podría finalizar en las primeras semanas diciembre con los testigos finales de la fiscalía. Ivanka Trump, que no hace parte de los acusados, deberá subir al estrado este miércoles. Todavía no está claro cuantos testigos llamará la defensa. Ángela González, Voz de América, Nueva York.