Amnistía Internacional dice que los detenidos en Siria, durante el año del levantamiento contra el régimen del presidente Bashar al-Assad, han sido sujetos a torturas generalizadas que equivalen a crímenes contra la humanidad.
El grupo de derechos humanos con sede en Londres emitió un reporte este 14 de marzo basado en entrevistas con 25 sirios, que afirman haber sido torturados en varios centros de detención antes de huir a Jordania.
El investigador del grupo sobre Siria, Neil Sammonds, dijo a la Voz de América que el informe documenta 31 métodos de tortura cometidos por fuerzas de seguridad, militares y pandillas armadas pro-oficialistas.
“Algunas de esas formas de tortura que vemos, son una especie de resurgencia de los métodos y niveles de abuso que no habíamos visto desde los oscuros días de los ochenta cuando el padre de Bashar al-Assad, Hafez, por supuesto estaba en el poder”, afirmó Sammonds.
El investigador de Amnistía Internacional, dijo que el número de personas que mueren bajo “circunstancias altamente sospechosas” durante su detención en Siria está aumentando, de 88 casos en los primeros meses del levantamiento, a más de 270, a un año de haber comenzado las protestas.
“Definitivamente, la situación de derechos humanos en el país está empeorando y continuamos pidiendo que la situación allí sea referida al fiscal de la Corte Criminal Internacional porque están ocurriendo crímenes contra la humanidad”, afirmó el investigador.
Sammonds dijo que el grupo tiene información de segunda mano sobre casos de abuso por parte de la oposición siria, pero que estos son muy pocos en comparación con los abusos cometidos por el gobierno de Assad.
En Siria, las fuerzas del gobierno recapturaron el control de la norteña ciudad de Idlib, cerca de la frontera con Turquía. Varios días de asaltos llevaron a cientos de desertores militares a abandonar Idlib una importante base de operaciones que habían retenido por varios meses.
