Los presos que estaban amotinados en una cárcel en Venezuela, liberaron al resto de los rehenes que mantenían secuestrados, después de que las autoridades aceptaran sus exigencias de proveer mejor atención de salud por un presunto brote de tuberculosis.
Quince empleados de la prisión se reunieron con sus familiares tras ser liberados, siguiendo a los que ya habían sido dejados libres a principios de esta semana.
El vice ministro del Interior, Edwin Rojas, dijo a los medios de prensa que el director de la prisión El Rodeo II, cerca de Caracas, fue despedido de su puesto como parte del acuerdo negociado con los prisioneros.
Los presos de El Rodeo II tomaron en rehenes al director de la prisión y 21 empleados la semana pasada. Los reos dijeron que un brote de tuberculosis mató a por lo menos dos prisioneros y exigían que todos los presos fueran sometidos a análisis para detectar la enfermedad y que reciban tratamiento.
La tuberculosis es una agresiva enfermedad bacteriana que ataca los pulmones y se expande rápidamente entre la gente debilitando su sistema inmunológico. Esta enfermedad mata unos dos millones de personas al año en todo el mundo. Expertos dicen que la enfermedad es tratable si los medicamentos se toman como se prescriben.