El gobierno de China exhortó al Vaticano a dar el primer paso para reparar la creciente separación entre el Papa Benedicto XVI y la Iglesia Católica China, autorizada por Beijing.
En una rueda de prensa en Beijing, la portavoz de la cancillería china, Jiang Yu, pidió al Vaticano que “reconozca el hecho de la libertad de culto en China” y que cree las condiciones para que mejoren las relaciones “a través de acciones concretas”.
El comentario se produce a raíz de comentarios realizados por el papa Benedicto XVI en su tradicional mensaje de Navidad, en el cual animó a los católicos chinos a que “no se desanimen por las limitaciones impuestas a su religión y conciencia”.
China y el Vaticano han tenido diferencias desde que la iglesia china designó un nuevo obispo y eligió nuevos líderes en semanas recientes en desafío a las autoridades de la iglesia católica.