Las manifestaciones en Chile se cobran su primera víctima. Un joven de 14 años falleció en Santiago de Chile durante la segunda jornada de protestas protagonizada por un paro para reclamar mejoras laborales.
Los testigos atribuyeron los disparos que mataron al joven chileno a la policía, según informa Reuters, que cita masivas marchas, saqueos, escaramuzas y cacerolazos durante el día de manfiestaciones.
Las protestas, que ya se extienden por más de tres meses desde que los estudiantes universitarios comenzaran a exigir una educación gratuita y de calidad entre otras reformas educativas, a los que se sumaron las últimas semanas miembros del mayor grupo sindical del país.
El joven que perdió la vida fue la primera víctima mortal, pero se han registrado numerosos heridos resultantes de los enfrentamientos con las fuerzas policiales, que hicieron uso de carros lanza agua y gas lacrimógeno para disolver las protestas en la capital y otras ciudades del país.
Según los convocantes, el jueves se realizó la mayor movilización desde el retorno a la democracia (1990), con más de 600.000 personas en las distintas manifestaciones.
Días atrás, y con una acusada pérdida de popularidad, el presidente chileno, Sebastián Piñera, señaló que “causa dolor como presidente ver que haya algunos que en estos mismos instantes están trabajando con mucho esfuerzo y dedicación para que nuestro país se paralice, para paralizar la salud, para paralizar la educación, para paralizar las carreteras, los puertos, los aeropuertos, las ciudades”.
Asimismo, Piñera realizó un llamado a los chilenos, “pero muy especialmente a los que ejercen cargos de liderazgo o cargos de elección popular, que hoy día nuestro país requiere más que nunca esa unidad, esa buena voluntad, ese espíritu constructivo, esa disposición al diálogo y a los acuerdos”.
