Talibanes fuertemente armados atacaron este martes con misiles de manera coordinada la embajada de EE.UU. y el cuartel general de la OTAN en Kabul y mataron al menos a siete personas e hirieron a más de una docena.
Como resultado del enfrentamiento entre los asaltantes y fuerzas de seguridad afganas, en el mayor ataque llevado a cabo por los insurgentes en la capital, el gobierno confirmó que habían muerto cuatro civiles, tres policías, y también al menos seis talibanes.
Según testigos, al menos dos de los atacantes se atrincheraron armados con lanzacohetes y fusiles de asalto en un alto edificio en construcción en la zona más protegida de Kabul y resistieron hasta que se quedaron sin municiones casi al anochecer.
Un portavoz de los talibanes dijo que los objetivos militares habían sido la legación diplomática de EE.UU, el cuartel de la OTAN, la sede del servicio de inteligencia afgano y otros edificios del gobierno.
Hace menos de un mes, a mediados de agosto, talibanes suicidas atacaron con bombas la sede del British Council y causaron la muerte a nueve personas.
Los periodistas de la Voz de América en la capital afgana, reportaron las explosiones y los enfrentamientos armados ocurridos en el distrito de las embajadas.
Hillary Clinton condena ataque
La secretaria de Estado, Hillary Clinton, en declaraciones realizadas en el Departamento de Estado, en Washington, dijo que "es un ataque cobarde". La jefa de la diplomacia estaodunidense dijo que Estados Unidos hará todo lo posible para asistir "a los civiles que han sido heridos".
Al referirse al ataque, la secretaria Clinton dijo que "vamos a dar los pasos necesarios no sólo para garantizar la seguridad de nuestra propia gente, sino también para segurar el área y hacer a los atacantes responsables por sus actos".
La secretaria de Estado destacó el valor del "personal civil que trabaja en nuestra embajada, los diplomáticos del Departamento de Estado y los expertos en desarrollo de la Agencia de Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID) y de otras agencias gubernamentales", quienes se encuentran en el país para asistir a la gente de Afganistán en el proceso de "transición a través de la estabilidad, seguridad y prosperidad".
Dos helicópteros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), están volando en círculos sobre los edificios en la plaza de centrica de Abdul Haq, donde se encuentran los atacantes. El Talibán dice que sus milicianos están armados con lanzacoehetes, chalecos con explosivos para ataques suicidas y armas automáticas AK-47.
El objetivo inicial de los atacantes "son los edificios de las agencia de inteligencia y un ministro, sostuvo un vocero del Talibán, Zabihullah Mujahid, en diálogo telefónico con la agencia Reuters. Posteriormente y siempre hablando desde una posición no identificada, el portavoz dijo que también atacarían la embajada de Estados Unidos y la sede de la FAS liderada por la OTAN.
El portavoz de la embajada de Estados Unidos en Kabul, Gavin Sundwall, dijo que "todo el personal de la embajada está protegido", aunque no confirmó informes sobre ataques de francotiradores contra la embajada.
Un portavoz de la policía identificado como Mohammed Zahir, afirmó que un grupo numeroso de hombres armados llevaron a cabo el ataque desde diferentes posiciones emplazadas cerca de la embajada estadounidense.
Mientras tanto, las autoridades estadounidenses dicen que creen que la red terrorista Haqqani, con sede en Pakistán, estuvo detrás del poderoso camión bomba que estalló en una base de la OTAN, en la zona central de Afganistán y que mató a cuatro civiles afganos e hirió a más de 100 personas, incluyendo 77 soldados estadounidenses.