La agencia para los refugiados de Naciones Unidas, ACNUR, y el American Immigration Council expresaron este miércoles a la Voz de América la preocupación de esa entidad por las nuevas reglas y parámetros establecidos por Estados Unidos para los solicitantes de asilo.
La medida afecta especialmente a los migrantes del llamado Triángulo Norte de América Central, compuesto por Guatemala, Honduras y El Salvador, y la atención se ha concentrado en parte en el tema del tercer país, donde los migrantes deben hacer su solicitud de asilo.
María Eugenia Frausto, portavoz del American Immigration Council, dijo que “esta regulación es preocupante porque es una regulación que rechaza de una manera implacable a aquellas personas que buscan asilo en Estados Unidos”.
“De una cierta forma, está básicamente destruyendo el sistema de asilo en Estados Unidos, que ha sido un legado histórico para este país”.
Señaló que “muchas personas a lo largo de la historia han visto a Estados Unidos como ese faro de esperanza o un lugar de refugio y con esta regulación eso parece más como algo del pasado y no tanto como un legado y orgullo de este país”.
El documento de 18 páginas, entre otros puntos, da a un agente de inmigración del Departamento de Seguridad Nacional la potestad de revisar un caso y decidir si esta persona se adecúa a estos acuerdos establecidos con El Salvador Guatemala y Honduras.
Frausto especificó que hay tres aspectos que preocupan más que nada al American Immigration Council, una ONG que defiende activamente a los inmigrantes en EE.UU. y se opone a las políticas de inmigración del presidente Donald Trump. “Primero, que hay mucho aún que no se sabe sobre esta regulación cómo va a ser implementada”.
Existe, dijo “la incertidumbre de saber qué van a contener esos acuerdos, cuándo se van a firmar.
“Hasta el momento se sabe que hay un acuerdo con Guatemala pero no se sabe cuándo se establecerá este o se firmarán los acuerdos con El Salvador y Honduras”, añadió.
Lo segundo es que esta regulación “básicamente dice que cualquier persona que llegue a Estados Unidos buscando asilo bien sea en un puerto de entrada o entre puertos de entrada ya no tiene opción de hacerlo en Estados Unidos y va a ser devuelto a cualquiera de estos tres países”.
Las excepciones a esa regulación son para aquellas personas que llegan a Estados Unidos con visas o son ciudadanos de países que tienen acuerdos de visado con Estados Unidos y menores no acompañados, explicó Frausto.
“Lo preocupante de esto es que, por ejemplo, un salvadoreño, llega a la frontera a Estados Unidos queda completamente a mano y a discreción de la gente del Departamento de Seguridad Nacional de determinar si esa persona bajo la regulación tiene la opción de aplicar por asilo en Estados Unidos”, dijo la portavoz.
En este caso, sería devuelta en este momento a Guatemala o El Salvador o Honduras cuando esos acuerdos estén finalizados y que al menos que esa persona diga tengo miedo de volver a cualquiera de estos países.
O sea, “que queda completamente a discreción del oficial de poner a esa persona en un proceso donde se determine cuáles son los miedos que pueda tener esa persona de ser transferido a cualquiera de estos países que están en el acuerdo”.
“Creo que es completamente obvio que esto fue una regulación para tratar de controlar lo que esta administración considera una crisis o una invasión en la frontera sur de Estados Unidos”.
Los más afectados van a ser personas que de estos países centroamericanos, justamente los que están en el acuerdo, que están huyendo por circunstancias de seguridad buscando asilo en Estados Unidos.
“Son mayoritariamente personas que pertenecen a países centroamericanos, personas que no tienen la capacidad de buscar una visa para venir a Estados Unidos y sí aquellas personas que están llegando a la frontera sur de Estados Unidos”, concluyó la portavoz del American Immigration Council.
El American immigration Council, con sede en Washington D.C., fue creado por la Asociación de Abogados de Inmigración de EE.UU. en 1987 bajo el nombre de American Immigration Law Foundation.
ACNUR teme por las personas vulnerables
La agencia para los refugiados de la ONU, ACNUR, expresó en un comunicado que no había sido tomada en cuenta para formar parte de los acuerdos de cooperación sobre asilo que se han firmado entre Estados Unidos y Guatemala, Honduras y El Salvador
Sybilla Brodzinsky, vocera de la ACNUR, dijo a la VOA que esa entidad ha entablado un diálogo con todos los gobiernos de la región involucrados en el tema para darles a conocer sus “serias preocupaciones” por la nueva política de asilo de la nación estadounidense.
Brodzinsky explicó que la preocupación principal de ACNUR es que la nueva política podría dar lugar al traslado de personas altamente vulnerables a países en donde sus vidas pueden correr peligro.
“Nosotros no somos parte de los acuerdos que se conocen como Acuerdos de Cooperación de Asilo, ACA, que el gobierno de Estados Unidos ha firmado con países como El Salvador Guatemala y Honduras”, afirmó.
“Nosotros como ACNUR hemos estado trabajando en Centroamérica desde hace años tratando de fortalecer los sistemas de asilo y el sistema de protección en general en estos países y.
“Siempre hemos pedido detalles para entender cómo se van a implementar en los diferentes países y estamos dialogando con los gobiernos (involucrados) para entender los mecanismos de implementación de estos acuerdos”.
Colaboración: Waldo Serrano.
