La estudiante estadounidense Amanda Knox, arribó al aeropuerto de su ciudad natal, Seattle, en el occidental estado de Washington, un día después de ser absuelta por un tribunal de apelaciones en Italia, donde pasó casi cuatro años en la cárcel.
Mientras tanto, en Italia, la fiscalía en el caso ha expresado descreimiento en el controversial fallo y prometió apelar el veredicto ante la máxima corte criminal de Italia, la Corte de Casación. El único que permanece detenido por el caso de asesinado por el que estuvo detenida, es Rudy Guede, un ciudadano marfileño que confesó el crímen e involucró a Knox y su ex novio, Rafaelle Sollecito.
Emocionada, Knox, de 24 años, dijo sentirse "abrumada" por las emociones. "Miraba por la ventanilla del avión y nada parecía ser real", dijo con la voz entrecortada, rodeada por su familia y abogados al llegar a Seattle.
"Mi familia es lo más importante para mi ahora y sólo quiero estar con ellos.Gracias por todo su apoyo", dijo Amanda Knox, antes de retirarse sin responder preguntas de los periodistas destacados en el aeropuerto de Seattle.
Mientras tanto, en Gran Bretaña, la prensa volvió a cuestionar a la justicia, tras el fallo que contrario al aplicado un año atrás en el caso de la estudiantes británica asesinada, Meredith Kercher.
Knox partió en la mañana de este este martes 4 de octubre de 2011 del aeropuerto Leonardo Da Vinci, de Roma, desde donde inició su viaje de regreso a Estados Unidos, a donde arribó por la noche, tras una escala en Londres.
Tras el fallo del tribunal de apelaciones, en Perugia, Italia, que consideró que la condena por el asesinato de su compañera de cuarto, la estudiante británica Meredith Kercher, en 2007, no era sostenible, Knox, y su ex novio, el italiano Rafaelle Sollecito, quedaron en libertad.
La estadounidense fue liberada en forma inmediata tras permanecer cuatro años en prisión y regreso de inmediato a Estados Unidos, informó oportunamente la Fundación Italia-Estados Unidos, que defendió la causa de Knox.
Knox absuelta
Tras una extenuante jornada en la sede judicial en la ciudad de Peruggia, este lunes 3 de octubre de 2011, la estudiante estadounidense Amanda Knox logró convencer a la corte sobre su inocencia en relación a la condena por homicidio.
Tras la apelación, la defensa de Knox consiguió que fueran cancelados los tres cargos que podrían haber confirmado su sentencia de 26 años de cárcel.
Mientras tanto, el hermano de la estudiante asesinada Meredith Kercher dijo que la familia siente que el caso vuelve a "empezar de cero" y que no entiende el giro radical que ha tenido el caso.
Knox hizo repetidos esfuerzos por contener las lágrimas mientras negaba su participación en el asesinato de su compañera de cuarto, Meredith Kercher, quien fue encontrada medio desnuda y muerta sobre un charco de sangre en su apartamento.
Knox dijo al jurado: "yo no maté, yo no la violé, no he robado, yo no estaba allí", y añadió que ha estado pagando con su vida por un crimen que no cometió.
Amanda Knox rogó una vez más a la corte que creyera en su inocencia y consideró "totalmente injustas" las imputaciones en su contra. Tras cuatro años en prisión, la joven estadounidense podrá caminar líbremente con la única condición de pagar los gastos de corte por su juicio.
El abogado de la defensa de la estudiante estadounidense Amanda Knox, presentó los argumentos finales en la apelación de la condena por homicidio tras la muerte de su compañera de habitación en Italia.
El abogado Carlo Dalla Vedova, dijo a la corte de Perugia, Italia, que Knox ha sido "crucificada" en el tribunal de la opinión pública después de que la fiscalía la llamó "bruja" y "diabla", y refirió que su aspecto inocente escondía una vida de sexo, drogas y el consumo de bebidas alcohólicas.
Una vez que su abogado terminó el alegato final, la fiscalía tuvo la oportunidad de responder, pero no logró mantener la decisión orginal de enviar a Knox 26 años a prisión por la muerte, en 2007, de la estudiantes británica Meredith Kercher.
Los fiscales dijeron que Knox y su entonces novio, Raffaele Sollecito, estuvieron involucrados, junto a Kercher en un juego sexual que se tornó violento.
Sollecito y un tercer acusado en el caso, Rudy Guede, se encuentran actualmente cumpliendo una condena de 25 y 30 años respectivamente, aunque la de Guede fue reducida. Los tres han proclamado su inocencia.
La defensa dice que las pruebas de ADN utilizadas contra Knox no eran confiables, y acusó a la policía de cometer errores en la investigación del caso.