Colegas de la periodista ucraniana Viktoria Roshchyna se reunieron en Kiev para rendir homenaje a la comunicadora, que murió en un centro de detención ruso. Roshchyna es el duodécimo caso de periodistas ucranianos fallecidos desde el inicio de la guerra con Moscú y el primero bajo custodia rusa.
Expertos consultados aplaudieron las acciones de EEUU para frenar las campañas de propaganda rusa en Internet.
Expertos en política exterior debaten sobre los posibles escenarios para la política de Estados Unidos hacia Ucrania, dependiendo de quién gane las elecciones presidenciales este año.
Tras meses de esfuerzos entre bastidores protestantes ucranianos y sus aliados en EEUU se reunieron con el presidente de la Cámara Mike Johnson para informar a los miembros republicanos del Congreso sobre el sufrimiento de los fieles a manos de las fuerzas rusas en las zonas ocupadas de Ucrania.
El Kremlin invierte miles de millones de dólares en campañas de propaganda sobre su guerra en Ucrania, y muchos de sus argumentos están calando en EEUU, incluso entre legisladores.
Condoleezza Rice, experta en política internacional y diplomática de alto rango en un gobierno pasado de EEUU, apuesta por un mayor y constante apoyo de Washington a Kiev como respuesta a la invasión rusa.
Durante su visita a Washington, Petro Poroshenko dijo que tuvo reuniones en el Capitolio, en el Pentágono y el Departamento de Estado y participó en un foro de la Unión Democrática Internacional.
En marzo, Ucrania cerró su embajada y consulados en Rusia. Al mismo tiempo, más de un millón de ciudadanos ucranianos cruzaron la frontera con Rusia, según la agencia de los refugiados de Naciones Unidas.
Imágenes tomada por una fuente del gobierno ucraniano parecen corroborar que las tropas rusas cavaron trincheras y movieron equipos pesados cerca de la planta nuclear de Chernóbil, esparciendo nubes de polvo radiactivo en el proceso.
Los ucranianos hablan sobre la guerra con sus familiares en Rusia en medio de la fuerte campaña de desinformación del Kremlin, aseguran.
En total, unas 300 personas están atrapadas en las instalaciones.
Un estudio del gobierno muestra que muchas mujeres todavía ganan menos que los hombres en los mismos niveles de trabajo.