Entre mascarillas, gel desinfectante y poca afluencia de votantes, se desarrolló la jornada electoral para elegir a los diputados de la Asamblea Nacional venezolana que se instala el próximo 5 de enero.
La jornada comenzó a las 6:00 a.m., hora local, con la apertura de los centros de votación. Horas después, algunos centros de votación no habían podido empezar el proceso pues miembros de mesa no habían llegado.
Sin embargo, para las 10:00 a.m, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Indira Alfonzo, informaba que el 99% de las mesas electorales ya estaban instaladas.
“La situación de Venezuela es muy compleja. Yo voto porque tengo simpatía por alguien, pero no estoy esperanzada de que vaya a haber una transformación de la noche a la mañana”, afirma Ivón Guzmán, ciudadana consultada por la Voz de América en un centro de votación en Caracas.
Señala que se habría impuesto la abstención por "caprichos ' de ambas partes, pero no considera que dejar sufragar sea la salida.
Ernesto Fuenmayor, otro ciudadano consultado en la capital del país, concuerda al asegurar que los problemas del país se deben resolver con el voto, y considera un “error político” por parte de la mayoría opositora su decisión de no participar
“Es un proceso difícil, pero hay que seguir en la lucha para reinstitucionalizar el país, para tomar las instituciones democráticas. No es algo rápido”, apunta.
José Rafael Martínez, confiesa a VOA Noticias que el saliente Parlamento le deja un sabor “bastante amargo”, pues considera que se fueron por el camino “incorrecto”.
Explica que hay personas que no quieren que haya votaciones, pues considera “que por la vía violenta pueden cambiar el sistema que se tiene en la actualidad”. Sin embargo, Martínez pide a los nuevos legisladores que “cumplan con su trabajo”.
En otro centro de votación, un elector, que solo se identificó como Juan, indicó que si bien considera que el proceso no cumple con las condiciones necesarias, “no importa, en Polonia estaban peor y votaron (…) Y Chile, Pinochet era dictador, estaban peor que aquí, y perdió”.
Juan dice que también participará en la Consulta Popular convocada por los 37 partidos que no participaron este domingo y que inicia mañana como respuesta a lo que consideran un “fraude”.
Un llamado a votar
Funcionarios y candidatos del chavismo, al igual que los candidatos que se denominan de oposición, hicieron constantes llamados en el transcurso del día a la participación.
“Aquí hay un cambio de todo lo que ha sido el protagonismo político de los últimos 20 años y nos corresponde, a los que vayamos el próximo 5 de enero, a ejercer esta noble representación, empezar a buscar soluciones”, aseguró a la VOA el candidato de la oposición a diputado Edgar Raúl Leoni.
Leoni considera que con los resultados, “la comunidad internacional debe replantearse la democracia venezolana y quienes son los representantes legítimos”.
Otro candidato opositor, Bernabé Gutierrez, indicó en un encuentro con la prensa que respeta a quienes tienen otra posición sobre el proceso, pero añadió: “tendrán que reconocer aquí la oposición, que derrotamos a Maduro”.
Expuso que seguirá trabajando “Hasta desalojarlo definitivamente del palacio (presidencial) de Miraflores”.
En conversación con la Voz de América, el también candidato opositor Negal Morales dijo que espera que este proceso permita “abrir una puerta a la institucionalidad”.
“Que ya no tengamos Parlamentos en paralelo. Sino que una sola Asamblea Nacional se convierta en el gran foro de debate político, en el gran punto de encuentro”, agregó.
Sin embargo, otros legisladores, como Edwin Luzardo, ratifica lo afirmado por la oposición meses atrás, indicando que se trata de un “proceso inconstitucional” y “amañado”.
“Es evidente el rechazo del pueblo a este evento. No hay un centro donde se pueda decir que hay presencia aceptable”, asegura Luzardo a VOA Noticias.
Baja participación en Maracaibo
El centro de votación instalado en el colegio Lucila Palacios, de Maracaibo, la ciudad más poblada de Venezuela, en el occidente del país, reflejaba la baja participación que se notó en la mayoría de los sitios de sufragio.
Filas de decenas de sillas marrones, ubicadas a sus afueras para la comodidad de los electores que esperarían en las colas, estaban desocupadas.
Seis mil electores están habilitados para sufragar allí, pero el flujo de participantes no era “muy amplio”, confió al mediodía José Barreto, coordinador del centro, esperanzado de que el porcentaje de votos aumentara antes del cierre de las mesas.
La mayoría de los votantes que ingresaban era adultos mayores. A Isabela Aguirre, una docente jubilada de 62 años, no le desanimó la poca asistencia de electores. “Es una muestra más de la soberanía que existe en Venezuela. Aquí no hay ningún tirano, ninguna dictadura, tenemos democracia plena”, afirmó a la Voz de América tras escoger sus opciones en el tarjetón.
Dijo tener la certeza de que cualquiera que sea la composición del Parlamento que se instalará en enero de 2021, será “mejor que la que tenemos”, que, a su entender, está integrada por diputados que “engañaron al pueblo”.
Maracaibo es capital de Zulia, el estado venezolano que aporta mayor cantidad de diputados en estas elecciones parlamentarias, también el más poblado, con cerca de cuatro millones de habitantes.
Este domingo, 2,5 millones de electores en esa región occidental están llamados a escoger 25 legisladores: 15 de manera nominal y 10 mediante el método conocido como “lista”. La ciudad, conocida como la cuna petrolera de Venezuela, concentra 30 por ciento de los votantes totales de Zulia.
Edgar Ramírez, venezolano jubilado, de 72 años, acudió a votar a la unidad educativa Primero de Agosto de Maracaibo porque interpreta el sufragio como “una obligación” para poder tener voz sobre los asuntos del país.
“Si uno no vota, entonces, ¿cómo puede hablar de si la cosa funciona o no? Ojalá que esa Asamblea cumpla sus funciones, que no se deje llevar por partidos políticos”, expresó, antes de ingresar a su mesa de votación.
A cuatro cuadras de ese centro de votación, Antonieta, de 24 años, aguardaba en una kilométrica cola a las afueras de una estación de gasolina junto a su amigo, Mervis, de 30 años. Ambos, habilitados para votar, no participaron.
“Tenemos tres días aquí (esperando suministro de gasolina en la estación). Eso es una trampa, ¿para qué voy a ir a votar? Eso no va a aportar soluciones a nada, no voy a reconocer esa Asamblea (de 2021), de verdad que no”, declaró, decepcionada, sentada sobre la capota de su vehículo.
Veeduría internacional y cuestionamiento
Representantes internacionales invitados por el Poder Electoral como el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, y la ex senadora de Colombia, Piedad Córdoba, realizaron recorridos por centros de votación en la mañana.
José Luis Rodríguez Zapatero, ex presidente del gobierno español, indicó en declaraciones a medios transmitidas por el canal oficial que el proceso electoral es “perfeccionable”, pero que, por la no participación de una parte de la oposición, no se puede dejar de lado la de todo el electorado venezolano.
Zapatero dijo conocer a los líderes de oposición que decidieron participar, quien aseguró han exigido las garantías y pidió respeto para ellos. A su entender, la nueva AN deber crear “un espacio político de diálogo para los opositores que decidieron no participar”.
EE.UU. ha expresado en varias oportunidades su rechazo por la realización de estas elecciones. Más recientemente, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Andrés Allamand, indicó que “no asignamos legitimidad” a las elecciones y dijo que su gobierno seguirá reconociendo a Guaidó.
Este mismo domingo, la cancillería de Ecuador emitió un comunicado indicando que no reconocerá los resultados de este proceso electoral. Indican que estos comicios se realizan “en un marco que no ofrece las condiciones para garantizar a los venezolanos un proceso libre, justo e inclusivo y democrático”.