El comisario Lázaro Forero, uno de los “presos políticos” beneficiados por el presidente Hugo Chávez, fue excarcelado tras pasar casi siete años en prisión para recibir tratamiento contra su cáncer de próstata.
Forero, condenado a 30 años de prisión por su responsabilidad en la muerte de algunos de los fallecidos en el golpe de Estado de 2002, fue puesto en libertad condicional luego de que el líder venezolano pidiera beneficios para sus enemigos políticos encarcelados que sufren problemas de salud.
"En principio quiero agradecerle a Dios, a Yajaira, a mis hijos y a los medios de comunicación social, que durante seis años y medio nunca nos olvidaron y nos permitieron seguir vigente", dijo al llegar a su casa, según publicó Globovisión.
A raíz de su cáncer, el presidente Chávez se ha solidarizado con sus adversarios presos que están enfermos y pidió medidas humanitarias para ellos. La Fiscal General, Luisa Ortega, dijo que ya han evaluado a 44 de 54 privados de libertad que padecen enfermedades graves en los diferentes penales del país, se les ha otorgado medidas humanitarias o medidas sustitutivas de libertad.
También la fiscal dijo que la llamada "comisión interinstitucional" evaluará la situación "otros internos que presenten enfermedades graves".
Forero es el segundo en ser excarcelado como parte del grupo de los llamados “presos políticos”, que según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) está formado por ocho opositores al gobierno.
Al llegar a su hogar, defendió su inocencia. "Estamos aquí, no en las condiciones que hubiésemos querido de demostrar nuestra inocencia como lo somos”, dijo Forero, citó Globovisión.
“Estoy en una libertad con un costo bastante alto por la enfermedad que tengo y, al menos, me ha permitido curarme en mi casa, hacerme mi operación, un tratamiento con calma, con el apoyo de mi familia que es fundamental en este tipo de enfermedad. Espero que esta medida llegue a otros compañeros que también están presos y enfermos", declaró a Globovisión.
El primero en ser excarcelado bajo similares condiciones fue Alejandro Peña Esclusa, férreo opositor de Chávez, que fue beneficiado por padecer cáncer de prostata.
