Al menos ocho cadenas privadas de comercio de alimentos asumirán formalmente la venta controlada de alimentos básicos utilizando el número de cédula de identidad de los compradores.
Las personas solo podrán comprar un día a la semana los productos con precio regulado, de acuerdo al número de cédula de identidad que será verificado con el uso de máquinas captahuellas.
La regulación en la venta con este sistema aplicará para alimentos como la leche, aceite, café o productos de uso básico como el detergente, champú y jabón, entre otros, que se encuentran escasos.
Algunos comercios venían regulando la venta con este mecanismo por cuenta propia.
La medida buscará evitar que una persona compre varias veces el mismo producto durante la semana y luego lo revenda en el mercado informal.
La implementación de este control en los comercios privados es rechazada por unos venezolanos, pero aplaudida por otros.
Blanca Gómez, una costurera de 58 años, rechazó la medida.
“No estoy de acuerdo, porque si ese día que me toca a mí no hay nada, no podré comprar nada en toda la semana”, dijo Gómez a la Voz de América.
Para hacer su compra, Gómez tuvo que pedir permiso en el trabajo, tiempo que luego tendrá que compensar con horas extras en su jornada.
“Hace días hice una cola de hora y media en la calle. Me quitaron la cédula en la cola y luego nos llamaban por el número de la cédula para recibir la leche, pero igual vi cómo se coleaban”, relató Gómez.
Por el contrario, otros venezolanos como Ana Isabel Arévalo, de 61 años, dedicada a la venta de películas en video, está de acuerdo con la medida.
“Si eso va a traer orden, bienvenido sea” dijo a la Voz de América. “Varias veces ha tenido que devolver el mercado porque no aguanto estar de pie tanto tiempo en la cola”.
Los comercios que dependen de la red de distribución de alimentos del Estado aplican desde hace un mes la venta por el número de cédula de identidad, los que verifican con máquinas captahuellas con el argumento de garantizar los alimentos para todos.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro atribuye la escasez de alimentos a la llamada “guerra económica” en contra de su gobierno.
