Los legisladores del estado de Utah propusieron un proyecto para permitir a los inmigrantes indocumentados que vivan y trabajen en Estados Unidos.
Un senador demócrata y un congresista republicano presentaron el proyecto 60, que plantea crear una exención federal para el estado de Utah.
De aprobarse, los inmigrantes indocumentados podrían registrarse en el Departamento de Seguridad Pública para seguir viviendo y trabajando en Utah, con los únicos requisitos de acreditar conocimientos de inglés, aprobar un examen de antecedentes y pagar impuestos.
Si bien, aquellos que reciban el permiso tendrían prohibido recibir servicios del gobierno o beneficios por desempleo, pero no podrían ser deportados, a diferencia de los que no lo tengan.
Además, los comercios podrán registrarse y emplear a todo trabajador con permiso, siempre que recolecten impuestos, cumplan con las leyes laborales e intenten primero llenar los empleos con inmigrantes documentados o ciudadanos estadounidenses.
De no obtenerse la exención federal, la ley tiene una "alta probabilidad" de ser declarada inconstitucional.
El patrocinador de la cámara baja, el representante republicano Jeremy Peterson, dijo que muchos residentes de Utah desean arreglar el problema inmigratorio y asegurar las fronteras ayudando a la vez a los inmigrantes, aun los indocumentados, que contribuyen a la comunidad.
"Esta norma es la mejor solución a las cuestiones que los votantes quieren solucionar, y lo hace con justicia y energía", afirmó Peterson.
Georgia busca verificar los documentos
Por otra parte, el senador estatal del estado de Georgia Jack Murphy espera introducir un proyecto de ley que obligue a los empleadores a verificar el estatus migratorio de las personas a quienes contratan.
El legislador plantea exigir a todas las empresas usar la base de datos federal E-Verify para asegurarse que sus nuevos empleados tienen autorización para trabajar en Estados Unidos.
La propuesta podría afectar a muchos productores rurales que contratan a inmigrantes indocumentados para las cosechas. El Buró de Agricultura de Georgia ha dicho que controlar la inmigración es tarea del gobierno federal, no de los funcionarios estatales.
