Los islamistas moderados de Ennahda dicen haber ganado suficientes votos en las elecciones del domingo 23 de octubre en Túnez como para obtener la victoria, y ahora se preparan para dar forma a un nuevo gobierno en la pequeña nación del norte de África.
Los históricos comicios, que fueron ampliamente considerados como libres y justos, son los primeros en realizarse en medio de la Primavera Árabe, que ha visto caer a gobiernos despóticos en el norte de África y Medio Oriente.
Aunque los resultados oficiales no serán anunciados hasta el martes 25 de octubre, los resultados preliminares dan al partido Ennahda un 40% de los votos. Pero hay estimaciones de que el partido podría obtener hasta el 50% de los votos.
La elección tiene el objetivo de elegir una Asamblea Constituyente que redactará una nueva Constitución y designará a un gobierno provisional para que gobierne hasta unas futuras elecciones generales.
La posible victoria de Ennahda en un país secular como en Tunéz, puede tener implicaciones extensas para otros partidos religiosos en la región, especialmente en Egipto y Libia.
Kamel Jendoubi, jefe de la comisión electoral del país, afirmó que este martes 25 de octubre se darán a conocer los resultados oficiales de los comicios.
Asimismo, los observadores internacionales dijeron que las elecciones fueron una de las más transparentes y un “ejemplo para los países de la región”.
El jefe de la delegación de observadores europeos, Andreas Gross, dijo que no había “forma de de discutir la legitimidad del resultado” y que ni siquiera era “decepcionante".
“Estamos tranquilos. Ya esperamos 50 años, podemos esperar 24 horas más”, declaró Houcine Khlifi, una votante entrevistado por AFP en el centro de la ciudad de Túnez.