La gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, ha sido nominada como embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas por el presidente electo Donald Trump, según diversas fuentes.
Haley, hija de inmigrantes de la India, está en su segundo período como gobernadora, pero no tiene experiencia en política exterior. Ella se convierte así en la primera mujer y la primera persona no blanca nominada para el gabinete de Trump.
Haley no apoyó a Trump durante las primarias del Partido Republicano, sino al senador por Florida, Marco Rubio, y cuando este abandonó la competencia, ofreció su apoyo al senador por Texas, Ted Cruz.
Poco antes de la elección del 8 de noviembre, dijo no estar entusiasmada con las opciones para sustituir al presidente Barack Obama, pero aseguró entonces que votaría por Trump.
Haley ha criticado la propuesta de Trump de prohibir la entrada de musulmanes a Estados Unidos y durante la respuesta al discurso sobre el estado de la nación de Obama, rechazó el estilo de Trump diciendo que “algunas personas piensan que tener la voz más fuerte en una habitación hace la diferencia”.
Trump la calificó de “débil en temas de inmigración” y en marzo tuiteó “La gente de Carolina del Sur está avergonzada de Nikki Haley!”.
Ambos sostuvieron una reunión la semana pasada en Nueva York en la que Trump la invitó a ser parte de su gobierno.
Hasta ahora se han anunciado los nombramientos de Reince Priebus como jefe de gabinete; Steve Bannon, como jefe estratega; y las nominaciones del senador por Alabama, Jeff Sessions, para la secretaría de Justicia; y la del congresista Mike Pompeo, como director de la Agencia Central de Inteligencia.
