El movimiento Talibán reclamó responsabilidad este lunes 23 de mayo de 2011, por un audaz ataque contra una base naval de Pakistán.
Una decena de milicianos asaltaron la base en el estado de Karachi, dando muerte a siete infantes de marina pakistaníes, destruyendo embarcaciones navales y al menos dos aviones estadounidenses de vigilancia.
Más de 12 horas más tarde, todavía se podían escuchar explosiones y se podían ver helicópteros militares sobrevolando la base donde decenas de comandos fueron emplazados para combatir a los militantes. El ataque fue descripto como el peor desde 2009.
Un vocero del Talibán dijo que el ataque fue lanzado en represalia por la muerte del líder de al-Qaeda Osama bin Laden, a manos de fuerzas especiales de Estados Unidos en Pakistán, a principios de mayo de 2011.
